Durante el ataque relámpago perpetrado por las fuerzas de Hamás, el sábado pasado, se realizó un macabro hallazgo: cerca de 260 cuerpos fueron encontrados en las cercanías del festival Supernova, informó la agencia de rescate Zaka.
Al respecto, el hallazgo ocurrió en las cercanías a la Franja de Gaza. En palabras de una testigo, que estuvo en medio de la balacera, la situación empezó cuando las alarmas de sirena, indicaban el peligro de bombardeos.
“Apagaron las luces y de la nada ellos, entraron y empezaron a disparar hacia todas partes”, sostuvo Reveller Ortel, al Canal 12 de Israel.
“Unos 50 terroristas llegaron en vans vistiendo uniformes militares”, explicó.
Del mismo modo, la sobreviviente relató que los milicianos de Hamás llegaron en vehículos, con armas de grueso calibre.
“Dispararon ráfagas y llegamos a un punto en el que todo el mundo paró sus vehículos y empezó a correr. Me subí a un árbol, a un arbusto como este, y empezaron a rociar a la gente. Vi masas de heridos tirados por ahí y yo en un árbol intentando entender qué pasaba”, reveló.
Pero Yaniv, un doctor de emergencia que acudió al sitio, mencionó a la emisora Kan News: “Hay al menos 200 cadáveres de israelíes en el área en la que me encontraba”.
“Fue una masacre. Nunca había visto algo así en mi vida. Fue una emboscada planeada. Cuando la gente salía por las salidas de emergencia, escuadrones de terroristas los esperaban allí y comenzaron a matarlos”, complementó.
Y sostuvo, “Había 3.000 personas en el evento, así que probablemente lo sabían. Tenían información de inteligencia”.
El relato de una sobreviviente del ataque de Hamás durante el festival
De acuerdo con Noa, quien estuvo en el sitio, el ataque fue totalmente a sangre fría. “Estaba disparando como loco directamente hacia mí, mirándome a los ojos. Le grité al DJ que saliera del auto y se pusiera a cubierto. Nos escondimos detrás de las puertas de los coches mientras la gente de los coches de delante que no habían muerto se arrastraba hacia nosotros”, explicó a The Sun.
“Entonces una bala pasó a mi lado desde el otro lado. Pensé que eran soldados respondiendo el disparo, pero para mi horror eran cuatro terroristas más, estaban a nuestro alrededor, no teníamos adónde ir”, agregó al medio inglés.
“Disparaban desde todas direcciones, por lo que esconderse detrás de las puertas del coche no tenía sentido”, cerró.