El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció que el Estado pagará la renta de las personas que hayan perdido sus hogares durante el sismo que ya deja más de 22.000 muertos, así como vuelos gratis desde y hacia la zona afectada.
“Si nuestros ciudadanos no desean quedarse en carpas hasta que sus nuevos hogares sean construidos, pagaremos su renta por un año, ya sea aquí en Adiyaman o en otras ciudades donde escogan vivir”, afirmó según lo citó el medio turco Daily Sabah, agregando que también se está tramitando la estadía de los sobrevivientes en hoteles.
Erdogan reconoció asimismo que las autoridades tienen problemas para gestionar los efectos del terremoto del lunes pasado por la enorme superficie afectada.
Ayuda internacional para Turquía
En una declaración ante la prensa en la provincia de Adiyaman, también golpeada por el seísmo, el mandatario elevó una vez más el balance de víctimas, que se sitúa ahora en 18.991 muertos y en más de 75.500 heridos sólo en su país.
Además, agradeció a los 94 países de todo el mundo que han enviado ayuda desde que dos terremotos de 7,7 y 7,6 devastaran un territorio grande como Bulgaria o Cuba en el sureste de Turquía.
“Nos enfrentamos a una de las mayores catástrofes de nuestra historia. Se han producido graves destrucciones en 10 provincias”, señaló Erdogan.
Una vez más, aseguró que todas las casas destruidas se reconstruirían en el plazo de un año y que el Estado turco pagará durante un año los alquileres de las personas que se tengan que instalar en viviendas fuera de su región.
“Decidimos declarar el estado de emergencia en una zona catastrófica. Por desgracia, algunos ignorantes están robando, asaltando mercados”, dijo Erdogan sobre un creciente problema en las zonas devastadas.
“Con el estado de emergencia (en vigor desde el jueves), el Estado turco ha asumido las competencias al respecto. Cuando se atrape a quienes cometan estos abusos, se tomarán las medidas necesarias”, advirtió el mandatario.
En las redes sociales circulan numerosos vídeos de supuestos saqueadores, atrapados por gente común y luego linchados.
“Nuestro ejército, policía y gendarmería desempeñan un papel activo para proporcionar seguridad y ayuda. 26 barcos, 75 aviones, 81 helicópteros, más de 12.000 equipos de construcción trabajan en la región día y noche”, aseguró Erdogan, quien está bajo creciente presión de sus críticos.
La oposición critica al gobernante partido islamista AKP no haber previsto desastres de este tipo, de haber malgastado fondos del estado que deberían haber ido en la seguridad contra terremotos y por obstaculizar y centralizar las ayudas.
En ese sentido, hizo un llamamiento a la ciudadanía a que no crea a quienes hablan de los insuficientes esfuerzos del gobierno.
“Por favor, no les crean, no importa qué institución u organización o partido político esté explotando este trabajo. No permitiremos a los que saquean o a los que quieren convertir este dolor en un saqueo político”, concluyó el presidente turco.