Los talibanes reivindicaron este miércoles el atentado suicida perpetrado este martes en Kabul contra el ministro afgano de Defensa, en el que murieron 12 personas, y amenazaron con cometer nuevos atentados contra altos cargos del gobierno.
El ataque fue llevado a cabo “por un grupo de muyahidines equipados con armas ligeras y pesadas” y es “el comienzo de las represalias contra los dirigentes de la administración de Kabul que ordenan ataques y bombardeos en todo el país contra civiles”, declaró en un comunicado Zabihulá Mujahid, portavoz de los talibanes.
“El ataque de anoche concluyó tras cinco horas (de tiroteos) por parte de las fuerzas de seguridad, que también rescataron a unos 80 civiles atrapados en la zona”, añadió ante Efe el portavoz del Ministerio del Interior, Marwais Stanekzai.
Se trata del primer ataque de magnitud en Kabul en varios meses reivindicado por los talibanes. El acuerdo firmado en febrero de 2020 en Doha con Estados Unidos, que previó la retirada de todos los soldados extranjeros de Afganistán, les impedía en teoría llevar a cabo ataques en las grandes ciudades afganas.
Dos grandes explosiones retumbaron en Kabul este martes en la noche, con dos horas de intervalo. Doce personas murieron, entre ellas 8 civiles y unos 22 resultaron heridos, según un balance actualizado el miércoles por el ministerio del Interior.
Un auto bomba conducido por un kamikaze estalló primero ante la casa de un diputado, vecina de la del ministro de Defensa, el general Bismillah Mohammadi, que está sano y salvo. Varios asaltantes lograron entrar luego en la vivienda del diputado.
Las fuerzas de seguridad tardaron cinco horas en acabar con la resistencia de los asaltantes, que fueron todos abatidos.
Los talibanes, un ultraconservador grupo islámico, se hicieron con el control de numerosas zonas rurales desde que las fuerzas extranjeras anunciaran su retirada de Afganistán a principios de mayo.
Además, Kabul registró esta mañana otra explosión en una carretera en la que, “como resultado, dos civiles resultaron heridos, y ya fueron trasladados al hospital para recibir tratamiento”, informó en un comunicado el portavoz de la Policía capitalina, Firdaws Faramarz.