Un edificio de la ONU en la ciudad de Harat, en Afganistán, fue atacado este viernes, incidente tras el cual se ha reportado la muerte de al menos un policía afgano y dejando varios heridos.
Las entradas del recinto fueron atacadas con lanzagranadas y armas de fuego, pero no se registró personal de las Naciones Unidas heridos.
Alrededor de dicha ciudad se enfrentan los talibanes y fuerzas gubernamentales, en medio de un repunte del avance talibán por el país, conforme inicia la fase final de retirada de las tropas de EE.UU. y la OTAN, el pasado 1 de mayo, y que Washington espera finalizar este agosto.
“Este ataque contra la entrada de un edificio de Naciones Unidas, claramente identificado, fue llevado a cabo por elementos antigubernamentales”, indicó la misión en un comunicado, agregando que se encuentran recabando información sobre el incidente.
La ONU recordó que los ataques contra su personal civil y sus recintos están prohibidos bajo ley internacional, por lo que podrían considerarse crímenes de guerra.
Para contrarrestar el avance de los talibanes, el Gobierno afgano está trabajando en una estrategia militar que le permita recuperar territorios y pasar de una posición defensiva a la ofensiva.
Aunque ambas partes del conflicto han afirmado que la única manera de poner fin a dos décadas de guerra en Afganistán es en la mesa de negociaciones, por ahora las conversaciones de paz intraafganas en Doha no han aportado resultados concretos.