El Partido Laborista de Reino Unido obtuvo una victoria electoral aplastante, barriendo al Partido Conservador del poder después de 14 años de gobierno. Keir Starmer, líder del Partido Laborista, se convertirá en el próximo primer ministro de Gran Bretaña. Esta es la peor derrota en los casi 200 años de historia del Partido Conservador, según reportó The New York Times.
El primer ministro saliente, Rishi Sunak, ofuscado, admitió la derrota. “El pueblo británico ha emitido un veredicto aleccionador esta noche”, dijo desde su circunscripción.
Sunak llamó a Keir Starmer para felicitarlo y anunció que viajaría a Londres para entregar su renuncia formal al Rey Carlos III.
Los resultados parciales y una encuesta a pie de urna realizada por la BBC y otras dos emisoras indicaron que los laboristas están en camino de ganar más de 400 -cerca de 408 según el citado medio- de los 650 escaños de la Cámara de los Comunes británica, frente a menos de 150 para los conservadores. Esta proyección marca la mayor derrota para los conservadores en su historia.
Si se confirman los pronósticos, los laboristas superarán la mayoría necesaria en la Cámara de los Comunes (326) para poder gobernar en solitario.
Reform U.K., un partido insurgente y antiinmigración, se proyecta ganar cuatro escaños, logrando un desempeño que perjudicó aún más a los conservadores. Aunque no se proyecta que el Partido Laborista iguale su récord del mayor número de escaños de 418 en 1997, está en camino de asegurar una mayoría dominante en el Parlamento.
El triunfo laborista también coloca a Gran Bretaña en desacuerdo con la creciente marea populista de ultraderecha en Europa. Starmer ha prometido un gobierno de centroizquierda fiscalmente prudente “al servicio de los trabajadores”. “El cambio comienza ahora”, dijo un jubiloso Keir Starmer a sus partidarios en el centro de Londres.
Victoria absoluta para Keir Starmer en Reino Unido: “El cambio comienza ahora”
Para Starmer, un abogado de derechos humanos de bajo perfil que ingresó al Parlamento en 2015, esta victoria es una notable reivindicación de su proyecto de cuatro años para alejar al Partido Laborista de las políticas izquierdistas de Jeremy Corbyn. Ha conseguido posicionar al Partido Laborista como una alternativa plausible al gobierno conservador.
Al recibir su triunfo en su circunscripción, Starmer dijo ante los congregados: “La gente de aquí y de todo el país ha hablado y está preparada para el cambio, para la política de los resultados, para volver a la política como servicio público”. “Ustedes votaron. Es hora de que nosotros cumplamos lo prometido”.
A las 5:00 am, cuando se confirmó que los laboristas tendrán la mayoría absoluta en el parlamento, Starmer habló de nuevo desde el centro de Londres, agradeció a sus votantes y afirmó que: “el cambio comienza ahora“. Insistió en que el “cambiado” Partido Laborista está listo para servir al Reino Unido.
El sólido desempeño de Reform UK fue una victoria para Nigel Farage, líder del partido y veterano disruptor político. Farage ganó un escaño después de fracasar en siete intentos anteriores de ingresar al Parlamento. Desde su nueva posición, Farage podría tratar de atraer a los votantes conservadores desencantados.
Hace menos de cinco años, los conservadores obtuvieron 365 escaños, la mayor cantidad desde 1987. Atraídos por la promesa de Johnson de “llevar a cabo el Brexit”, los votantes laboristas desencantados de las Midlands y el norte de Inglaterra se pasaron a los conservadores. El sondeo a pie de urna indicó que muchos de estos votantes habían vuelto al Partido Laborista, mientras que otros votaron por la reforma de UK.
Frustración con la economía
Los votantes expresaron su frustración con la economía, un aumento de la inmigración tras el Brexit y un Servicio Nacional de Salud sobrecargado. Sunak obtuvo el 47,5 por ciento de los votos en su circunscripción de Richmond y Northallerton. Aunque ganó por un margen más estrecho, reconoció que su partido había perdido.
Pocos en Richmond esperaban su expulsión del Parlamento. El Partido Conservador ha dominado durante mucho tiempo en el área rural de Yorkshire. “Si pusieran un macho cabrío para Richmond, el conservador, entraría”, dijo Lawrence Hathaway, de 94 años.
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