Los muertos por el atentado terrorista de este viernes en la sala de conciertos Crocus City Hall, provincia de Moscú, aumentaron a 143, según la última actualización entregada por los medios locales.
La cifra fue dada a conocer por la editora del canal de televisión estatal RT, Margarita Simonyan, a través de su cuenta de Telegram, y fue replicada por la agencia de noticias RIA Novosti.
Además de las víctimas fatales, según las últimas cifras del Ministerio de Salud ruso, hay 121 personas heridas, de las cuales 107 están hospitalizadas.
De acuerdo con lo informado por las autoridades, 44 personas se encuentran en estado grave y otras 16 víctimas, entre ellas un niño, en estado “muy grave”.
Putin promete venganza
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, habló este sábado por primera vez sobre el atentado en la sala de conciertos Crocus City Hall, en la provincia de Moscú. El mandatario prometió venganza y aseguró que serán identificadas y castigadas todas las personas que perpetraron el ataque terrorista.
“Todos los autores, organizadores y los que ordenaron este crimen recibirán su justo e inevitable castigo. Sean quienes sean, quienquiera que los haya mandado”, declaró Putin durante un discurso a la nación, transmitido por los canales de televisión estatales.
“Repito: identificaremos y castigaremos a cada uno de los que están detrás de los terroristas y que prepararon esta atrocidad, este golpe contra Rusia y nuestro pueblo”, afirmó el mandatario.
Si bien el grupo yihadista Estado Islámico se atribuyó el ataque, Putin no mencionó a esa organización en su discurso.
El presidente ruso indicó -tal como informó previamente el Servicio de Seguridad Federal- que los autores materiales de la matanza fueron detenidos cuando se dirigían a la frontera ucraniana donde, según el mandatario, “les habían preparado una entrada en el lado ucraniano para cruzar”.
El jefe de Estado afirmó que Rusia fue testigo de “un preparado y organizado asesinato en masa de personas pacíficas e indefensas”. Putin sostuvo que “a los terroristas, asesinos y bestias, que no tienen ni pueden tener nacionalidad, les espera un funesto destino: venganza y olvido”.