“El 17 de julio, durante la realización de un vuelo de entrenamiento en la región de Krasnodar sobre las aguas del mar de Azov, se estrelló un avión de ataque ruso Su-25”, dijo la agencia TASS.
La causa preliminar del accidente es un fallo en el motor, agrega el comunicado, que no precisó la suerte del piloto.
Pese a esto, según varios canales de Telegram rusos el piloto consiguió eyectarse y fue localizado por los equipos de búsqueda, pero murió a por las heridas que le causó la caída.
Recordemos que un incidente similar ocurrió en la bahía de Avacha, al sureste de la península de Kamchatka, al este de Rusia.
En esa oportunidad un avión de combate ruso MiG-31 se estrelló mientras realizaba un vuelo de entrenamiento.
Se trata de un avión supersónico desarrollado para la misión de interceptación aérea y escolta táctico de aviones bombarderos.
Con varios elementos de diseño similares al MiG-25, el MiG-31 está considerado como uno de los aviones de combate más rápidos del mundo.