La sublevación del Grupo Wagner todavía genera coletazos después que la hija del general ruso Sergei Surovikin, confirmó que su padre, a quien apuntan como uno de los instigadores del motín del Grupo Wagner, el ejército conformado por mercenarios, estaría a salvo.
Así lo mencionó Veronika Surovikina, “sinceramente, no le ha pasado nada. Está en su lugar de trabajo”, expresó a Telegram Baza.
En ese sentido, todavía no se conoce el paradero de Surovikin, “les recomiendo dirigirse al Ministerio de Defensa, es su prerrogativa”, sostuvo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, sin entregar mayores detalles.
Cabe mencionar que tanto el líder del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, y el general Surovikin eran estrechos colaboradores.
El oscuro destino de Sergei Surovikin
De acuerdo con The Moscow Times, el bloguero prorruso, Vladímir Románov, reveló que Surovikin está cautivo en el centro de detención de Lefórtovo, en Moscú, que está en manos del servicio de seguridad ruso, FSB.
Esta agencia, que reemplazo a la KGB, maneja el sitio donde se dirigen los opositores del presidente ruso, Vladímir Putin y funciona secretamente como centro de interrogatorios, donde son llevados los funcionarios que han cometido delitos de alta traición como terrorismo o espionaje.
Si bien es una prisión de larga data, comenzó a funcionar en 1883 por orden del zar Alejandro III, explica El Debate.
Al interior, las prácticas de la cárcel ubicada en Moscú, son especialmente crueles, puesto que los cautivos son sometidos a largos períodos de aislamiento y duchas heladas.
Según recoge El País, el periodista Alexéi Venedíktov, director de Eco de Moscú, informó que la familia del general no sabe cuál es su paradero. “El general Surovikin no ha estado en contacto con su familia durante tres días. Tampoco responden sus escoltas. Solo tengo esos hechos”, dijo.
Ahora bien, el diario Financial Times también informó sobre la detención de Surovikin.
Por último, The Wall Street Journal, indicó que el objetivo principal de Prigozhin era capturar al ministro de Defensa y al jefe del Estado Mayor rusos, un escenario que habría contado con el apoyo de varios generales, entre ellos, el propio Surovikin.