La Corte Penal Internacional (CPI) anunció el viernes que emitió una orden de detención contra el presidente ruso, por la deportación de niños en zonas de Ucrania ocupadas por Rusia. Moscú califica de "nula" y "sin sentido" orden de detención de Putin.
Rusia calificó de “nula jurídicamente” la orden de arresto del jefe del Kremlin, Vladimir Putin, ordenada este viernes por la Corte Penal Internacional (CPI).
Lo anterior, por la deportación ilegal de niños y su traslado de zonas ocupadas en Ucrania hacia Rusia, lo que supone un crimen de guerra.
“Las posibles ‘prescripciones’ de arresto que salgan del Tribunal Internacional serán para nosotros jurídicamente nulas”, escribió María Zajárov, portavoz de Exteriores rusa, en su canal de Telegram.
En la misma línea, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, tachó la orden de “indignante” e “inadmisible”.
El tribunal, creado en 2002 para juzgar los peores crímenes cometidos en el mundo, investiga desde hace más de un año posibles crímenes de guerra o contra la humanidad cometidos en Ucrania durante la ofensiva rusa.
Ni Rusia ni Ucrania son miembros de la CPI, pero Kiev aceptó la competencia del tribunal sobre su territorio y trabaja con el fiscal.
Rechazo en Rusia ante orden de arresto contra Vladimir Putin
“Rusia, como otros países, no reconoce la jurisdicción de ese tribunal. Por lo que cualquier decisión de ese tipo es para Rusia insignificante desde el punto de vista del derecho”, dijoel portavoz del Kremlin, según la agencia RIA Nóvosti.
La sala de cuestiones preliminares de la CPI también emitió una segunda orden de detención contra la política rusa María Lvova-Belova.
Se tata de la comisionada presidencial para los Derechos del Niño en Rusia, con la misma acusación.
Putin se ha reunido en varias ocasiones con Lvova-Belova para abordar temas como la situación de los menores en los territorios ucranianos ocupados por las tropas rusas.
Al respecto, Lvova-Belova se congratuló hoy de que la comunidad internacional aprecie la labor que Rusia hace para que los niños no permanezcan en zonas de guerra y crear para ellos “buenas condiciones de vida”.
“Hubo sanciones de todos los países, incluso de Japón, contra mí. Ahora, una orden de arresto. Interesante qué vendrá después. Seguimos trabajando”, dijo a la prensa local.
Niños en medio de la guerra
En octubre pasado la funcionaria admitió que unos 350 huérfanos ucranianos habían sido acogidos por familias rusas.
Mientras, el subjefe del comité internacional del Senado ruso, Vladímir Dzhabárov, tachó de “criminales” a los miembros del tribunal de La Haya y abogó por la liquidación de la corte.
La CPI considera a Putin “presunto responsable” de la deportación ilegal de niños ucranianos, lo que ha sido denunciado en numerosas ocasiones por las autoridades de Kiev.
Ambas órdenes de detención son las primeras de su tipo que emite la CPI en el contexto de su investigación de crímenes en la guerra en Ucrania.
Los delitos de los que se le acusa ocurrieron al menos desde el 24 de febrero de 2022 en el “territorio ocupado de Ucrania”, señaló la CPI.
Rusia no ha ratificado el Estatuto de Roma, el tratado fundacional de la CPI, por lo que no es miembro de este tribunal, como tampoco lo es Ucrania.
Pese a esto, Kiev sí ha autorizado a la Corte a investigar la comisión de crímenes de guerra durante la conocida como “operación militar especial” rusa en Ucrania.
De hecho, el fiscal general ucraniano, Andriy Kostin, agradeció inmediatamente por Twitter al fiscal de la CPI, Karim Khan, lo que llamó “histórica decisión”.