El excapitán era acusado de los delitos de revelación de secretos militares con fines de espionaje, obtención de información secreta para su revelación y comunicación al extranjero, entre otros cargos. La Fiscalía había solicitado la cadena perpetua, según informan medios locales.
Biot fue detenido en marzo de 2021, junto a un oficial de las Fuerzas Armadas rusas, acusados ambos de llevar a cabo “un intercambio de información clasificada a cambio de dinero”, según informaron por entonces los Carabineros en un comunicado.
Este escándalo hizo que el embajador de la Federación Rusa en Italia, Sergey Razov, fuera convocado en el Ministerio de Exteriores italiano.
Sorprendidos de forma flagrante
La detención del capitán de fragata y del funcionario ruso tuvo lugar la noche del 30 de marzo “durante un encuentro clandestino entre los dos, quienes fueron sorprendidos de forma flagrante inmediatamente después de la entrega de documentos clasificados por el oficial italiano a cambio de una suma de dinero”.
El intercambio de los documentos sensibles se produjo en un estacionamiento de la periferia sur de Roma a cambio de 5.000 euros, monto equivalente a unos 4 millones 200 mil pesos chilenos.
La operación de los carabineros, bajo la dirección de la Fiscalía de Roma, se efectuó en el marco de una prolongada actividad informativa llevada a cabo por la Agencia de Información de Seguridad Interna, con el apoyo del Estado Mayor de la Defensa, se informó en un comunicado.
El 31 de marzo de 2021 Italia expresó a Rusia su “firme protesta” ante este caso de espionaje y anunció “la expulsión inmediata” de los dos funcionarios rusos implicados en este “gravísimo asunto”, según declaró el entonces ministro de Exteriores, Luigi di Maio.