Mañana se suponía que el gigante ruso Gazprom debía reponer envíos de gas por el gasoducto Nord Stream, pero eso no ocurrirá por la falta de una turbina que envió a reparación a Canadá y de la cual, aseguran, no tienen constancia de devolución. "Rusia nos está chantajeando, usando la energía como arma. Sea el corte parcial o total, Europa debe estar preparada", dijo hoy la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que le pidió a los Estados miembros reducir su uso de gas en un 15% entre el 1 de agosto y el 31 de marzo de 2023.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, advirtió este miércoles que Rusia está empleando la energía como “arma” ante el posible corte parcial o total del suministro de gas de este país a los Estados miembros y pidió a los gobiernos que estén “preparados” ante este “probable” escenario.

“Rusia nos está chantajeando, usando la energía como arma. Por tanto, sea el corte parcial o total, Europa debe estar preparada”, dijo Von der Leyen en rueda de prensa en la que el Ejecutivo comunitario presentó su propuesta para que los países de la Unión Europea reduzcan en un 15% su consumo de gas entre el 1 de agosto y el 31 de marzo de 2023.

Von der Leyen reconoció que esta reducción “es pedir mucho”, pero insistió en que la lección aprendida por la UE durante la pandemia de coronavirus debe ser, ante una crisis que “golpearía a todos y cada uno de los Estados miembros”, que el “peor enemigo de la UE sería la fragmentación” y que “si actuamos unidos podemos abordar cualquier crisis”.

La presidenta del Ejecutivo comunitario explicó que una reducción del consumo de gas del 15% en el periodo propuesto equivale a 45 kilómetros cúbicos de gas natural, una cantidad que permitiría al bloque comunitario “superar el invierno de manera segura” en el caso de un corte total en el suministro por parte de Moscú.

Situación del gas en Europa ante un posible corte parcial o total desde Rusia

Según aseguró, la Unión Europea ya ha logrado llenar sus depósitos conjuntos de gas al 64% de su capacidad, cuando el objetivo es que estuvieran al 80% para noviembre.

Junto con ello señaló que ha aumentado el suministro de gas no ruso en 35 kilómetros cúbicos desde enero gracias al incremento desde otros países, como Estados Unidos, Noruega o Catar, entre otros.

También se ha logrado el equivalente a cuatro kilómetros cúbicos de gas natural mediante un incremento adicional de 20 gigavatios de capacidad de energías renovables, que Bruselas recomienda priorizar en la búsqueda de recursos alternativos al gas en la reducción de su consumo.

Ante la posibilidad que algunos Estados miembros rechacen el objetivo de reducción de consumo de gas, Von der Leyen señaló que la comisión tiene herramientas para hacer cumplirlo.

Eso sí, subrayó la importancia que esta opción “sea el último recurso” y que se cree “conciencia sobre lo interdependientes que somos” para que impere el principio de solidaridad.

“Cuanto más rápido actuemos, más ahorraremos y más seguros estaremos en nuestro objetivo de solidaridad. Hay Estados miembros más expuestos que otros al gas ruso y más vulnerables al riesgo de una interrupción, pero todos los Estados miembros sufrirán las consecuencias”, advirtió la alemana.

¿Qué pasa en Rusia?

El gigante gasístico ruso Gazprom, controlado justamente por el Estado ruso, reiteró este miércoles que no puede garantizar el bombeo seguro de combustible por el gasoducto Nord Stream sin una turbina que estaba en reparación en Canadá y de cuya devolución no tiene constancia.

“Gazprom una vez más llama la atención sobre el hecho de la devolución del motor de la turbina, enviada para su reparación y el futuro mantenimiento de otras turbinas para la estación compresora de Portovaya influyen directamente en la explotación segura del Nord Stream”, dijo la empresa en un comunicado.

La compañía hizo estas declaraciones un día antes de la reanudación programada del gasoducto tras un periodo de mantenimiento “planificado” de diez días.