El tribunal penal de Old Baily, en Londres, dio a conocer la condena después de que el lunes Ali fuese declarado culpable del asesinato de Amess y también de planear atentados contra otros parlamentarios.
El juez Nigel Sweeney, de ese tribunal, dijo que Ali no mostró “remordimiento o pena por lo que hizo, todo lo contrario. Este ha sido un asesinato que ha golpeado el corazón de la democracia”.
El magistrado resaltó que la muerte del parlamentario supuso una pérdida de “importancia nacional”.
Durante el juicio Ali manifestó no haber lamentado el asesinado del diputado, apuñalado mientras atendía a electores en una iglesia del sureste inglés.
El simpatizante del EI llegó a defender su ataque por considerar que el diputado apoyó en el Parlamento una votación para llevar a cabo ataques aéreos contra Siria en 2014 y 2015.
El parlamentario, que representaba a la circunscripción de Southend West, en el condado de Essex (sureste inglés), fue asesinado a puñaladas mientras celebraba en una iglesia metodista de la localidad de Leigh-on-Sea la llamada “surgery”, la habitual sesión que todos los diputados tienen cada viernes para atender personalmente problemas o quejas de sus electores.
Ali fue detenido en la misma iglesia poco después de que apuñalase al diputado en presencia de otras personas, que hicieron la llamada de emergencia a las fuerzas del orden.
De acuerdo con los detalles del juicio, Ali, cuya familia es originaria de Somalia, se radicalizó en 2014, lo que le llevó a abandonar sus estudios de medicina.