Marina Ovsiannikova, empleada de una cadena de televisión rusa que irrumpió durante un informativo pro-Kremlin para denunciar la ofensiva en Ucrania, es juzgada este martes por haberse manifestado ilegalmente, según un tribunal moscovita.
La audiencia está en curso, según el tribunal del distrito Ostankino de Moscú, mientras que la encausada, que se declaró no culpable, puede ser condenada a 10 días de detención.
“No reconozco mi culpabilidad”, dijo Ovsiannikova en la sala de audiencia, agregando que “sigo convencida de que Rusia comete un crimen (…) Y que es el agresor de Ucrania”.
De momento no ha sido imputada por crimen de publicación de “informaciones falsas” sobre el ejército ruso, sancionable con hasta 15 años de prisión.
Ovsiannikova, de unos 40 años, madre de dos hijos pequeños y natural de Odesa, en Ucrania, es empleada de la televisión Pervy Kanal, muy cercana al poder ruso.
El lunes por la noche, irrumpió en medio del informativo y se situó detrás de la presentadora con una pancarta en la que se leía: “No a la guerra, no crean la propaganda. Aquí les están mintiendo”.
Su abogado, Daniil Berman, había dicho posterior a ello que temía que su clienta fuera objeto de un juicio penal.
“Hay muchas posibilidades de que las autoridades decidan dar ejemplo para que otros detractores se callen”, manifestó.