Los ataques a una central nuclear, como el lanzado por las fuerzas rusas contra la planta ucraniana de Zaporiyia, en Ucrania, son contrarios a las normas internacionales y una gran irresponsabilidad.
Esto, según lo denunció durante la jornada de este viernes la jefa de Asuntos Políticos de la ONU, Rosemary DiCarlo.
“Las operaciones militares alrededor de instalaciones nucleares no son sólo inaceptables, sino altamente irresponsables”, dijo DiCarlo al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, reunido de urgencia para discutir el ataque ruso a Zaporiyia, en el sureste de Ucrania.
La responsable de la ONU subrayó que los ataques contra centrales nucleares violan la ley humanitaria internacional.
Esto, además de urgir a las partes a trabajar con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) para garantizar la seguridad de la planta.
Lo anterior, además de permitir que personal de esa agencia pueda viajar a Ucrania para trabajar con los reguladores.
“Ucrania conoce demasiado bien la devastación que un gran accidente nuclear puede causar. El desastre de Chernóbil en 1986 es un duradero ejemplo de por qué es vital asegurar que todas las plantas nucleares tienen los estándares más altos de seguridad”, señaló DiCarlo.
“Se deben hacer todos los esfuerzos para evitar un incidente nuclear catastrófico”, insistió la diplomática.
Por otra parte, la autoridad alabó al personal de la central nuclear de Ucrania por asegurar el funcionamiento seguro de la planta en medio de esta crisis.
Según la agencia nuclear de la ONU, el ataque contra la instalación no provocó escapes radiactivos. Esto, a pesar de que un edificio de la instalación llegó a incendiarse como consecuencia de los ataques.