El ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmitri Kuleba, aseguró este jueves que la prioridad es que Rusia fracase en su plan de “desestabilizar” su país.
No obstante, no descarta ningún otro escenario, incluido un conflicto bélico.
“Nuestra prioridad principal es que Rusia no tenga éxito en su plan de desestabilizar Ucrania, pero nos preparamos para cualquier escenario”, dijo Kuleba en rueda de prensa conjunta en Copenhague con su homólogo danés, Jeppe Kofod.
Kuleba cree que la idea inicial de Rusia es apostar por la fuerza como amenaza para desestabilizar a Ucrania, usando además ciberataques y campaña de desinformación para forzarla a hacer concesiones.
Rusia, Ucrania, Francia y Alemania acordaron el miércoles en París volver a reunirse dentro de dos semanas en Berlín.
Eso para desescalar el conflicto entre Moscú y Kiev por la región del Donbás.
Los involucrados se mostraron “comprometidos” para reducir las diferencias en sus posiciones.
“Estamos listos para continuar por la senda de los Acuerdos de Minsk (de 2019)”, afirmó Kuleba.
En canciller cree que ese acuerdo garantiza que Moscú seguirá apostando por la vía diplomática hasta entonces.
“Pero Rusia tiene que ir a la reunión de buena fe y con el propósito de contribuir a que haya progresos”, agregó.
El ministro de Exteriores ucraniano resaltó que su país no aceptará ninguna solución sobre Ucrania que sea tomada sin tomar en cuenta su opinión.
Operación militar de Rusia en Ucrania
Kiev considera fundamental enviar mensajes políticos coordenados a Rusia.
El plan considera a los aliados occidentales.
La idea es convencerla que fracasará su “operación militar” en la región.
Además, se busca preparar sanciones económicas y estrechar la cooperación militar y económica con los aliados .
Reforzar la seguridad en Ucrania es otro de los objetivos.
El Gobierno danés anunció hoy el envío de 550 millones de coronas (74 millones de euros) a Ucrania.
El monto busca apoyar las reformas democráticas, los Derechos Humanos y la independencia energética de Kiev.
Esta ayuda se suma a los 860 millones de coronas (116 millones de euros) de otro suministro.
Ese apuntaba a apoyar varias iniciativas, entre ellas la política de defensa.