La desaparición de la británica Madeleine McCann vuelve a cobrar notoriedad luego de que los investigadores del caso descubrieran “pruebas impactantes” que permitirían presentar cargos contra el alemán Christian Brueckner, el principal sospechoso del secuestro y posible asesinato de la niña, en un caso continúa manteniendo en vilo al Reino Unido y al mundo.
“La triste historia de Madeleine McCann es una historia que tiene muchas facetas alemanas”. Tal fue la afirmación de la editora en Jefe, Juliane Ebling, parte del equipo de detectives y periodistas que investigan el caso de la pequeña Maddie, quien desapareció durante sus vacaciones familiares en 2007 en Algarve, Portugal.
En un caso de dimensión internacional, que involucra a la justicia de Portugal, Reino Unido y Alemania, los investigadores entregaron nuevas pruebas a los responsables de la investigación en medio de una pesquisa para hacer un nuevo documental del caso, informó el medio británico The Sun.
En tanto, las pruebas apuntarían a Christian Brueckner, el principal sospechoso de la desaparición de Madeleine según las autoridades de Alemania, país de donde es oriundo el hombre, que hasta el momento no tenían pruebas para acusarlo formalmente por la desaparición de la niña a pesar de las férreas sospechas.
Según el equipo que dio con los nuevos hallazgos, existen “muchas pistas e indicios nuevos” que muestran que Brueckner es el responsable y que estaba cerca de Praia da Luz cuando Madeleine desapareció mientras sus padres cenaban en un restaurante de tapas a metros del departamento donde ella dormía con sus hermanos.
“El caso está siendo juzgado en el Tribunal Regional de Braunschweig (Alemania), ya que el alemán Brueckner es el principal sospechoso. En este entorno hay muchas mujeres y hombres alemanes que pueden describir detalles individuales que rodean el crimen”, detalló la editora Ebling. Asimismo, afirmó que la periodistas a cargo del documental, Jutta Rabe, investigó material impactante en Alemania, Portugal e Inglaterra durante los últimos meses, que “incriminaría gravemente a Christian Brueckner”.
Por su parte, Brueckner, quien es el principal sospechoso del caso McCann desde mediados del 2020, tiene antecedentes de pedofilia y actualmente está cumpliendo una pena de 7 años por haber violado a una estadounidense también en Algarve en 2005, la ciudad donde vacacionaba “Maddie” con su familia pero dos años antes.
Además, se investiga su participación en otros casos delictivos en Portugal, entre ellos la violación en 2004 de la irlandesa Hazel Behan, también en el Algarve; la agresión sexual de una niña de diez años en 2007; y el abuso de cuatro niños en un festival en São Bartolomeu de Messines, en 2017.