El líder opositor ruso, Alexéi Navalni, pidió el lunes a un tribunal que falle contra las revisiones nocturnas a las que le someten en su cárcel en la región de Vladímir, a unos 200 kilómetros de Moscú, y que “de hecho, constituyen una tortura” mediante la privación de sueño.
“Intente usted poner un despertador que suene ocho veces por la noche, despertándola cada hora”, dijo Navalni a la magistrada por videoconferencia desde su prisión.
El opositor afirmó que no ha hecho nada por lo que las autoridades puedan considerarle proclive a la fuga y efectuar revisiones con tanta frecuencia.
“Solo quiero que dejen de venir y despertarme por las noches”, afirmó en un vídeo retransmitido por el canal de televisión Dozhd.
A su vez, un representante de la prisión, presente en la vista judicial, aseguró que los funcionarios de la cárcel cumplen con sus tareas de vigilancia de presos proclives a la fuga una vez cada dos horas, como exige la ley en estos casos.
Navalni, de 44 años, cumple una condena de dos años y medio de presidio por un antiguo caso penal y se está recuperando de una huelga de hambre de tres semanas, que abandonó a fines de abril.
El opositor, detenido el 17 de enero, fue declarado por las autoridades rusas proclive a la fuga un mes después y desde entonces es objeto de una vigilancia reforzada.