Michel Fourniret, el asesino en serie más famoso de Francia, conocido como “el ogro de las Ardenas” por la muerte de al menos ocho mujeres jóvenes y niñas en esa región, murió este lunes, según anunció la Fiscalía de París.
Fourniret, de 79 años, cumplía dos condenas de cadena perpetua y había sido ingresado esta jornada en el hospital de La Pitié-Salpêtrière de París en una situación “irreversible”.
La Fiscalía señaló en un comunicado, que ha abierto una investigación sobre las causas del fallecimiento.
En total, Fourniret fue condenado por ocho asesinatos, aunque la Justicia investigaba su posible implicación en otras dos muertes, y él se atribuía un total de once víctimas.
Fue detenido en 2003 en Bélgica tras intentar secuestrar a una niña, y las autoridades comenzaron a ver en él al responsable de las desapariciones de niñas en las Ardenas, una región boscosa situada entre el sur de Bélgica y el noreste de Francia.
Su tercera esposa, Monique Olivier, fue considerada cómplice por ayudar a atraer a varias víctimas, y condenada a 28 años de prisión.
Hijo de una familia desestructurada (padre alcohólico y madre abusadora), Fourniret comenzó a tener problemas con la justicia por abusos sexuales a una niña ya en 1967, con 25 años y siendo padre de familia.
Descrito por los investigadores de su caso como muy inteligente, perverso y obsesionado con la virginidad, entre 1984 y 1987 purgó una primera pena de prisión por agresiones sexuales y violaciones a menores de edad.
Tras conocer a Olivier estando él en prisión, se hicieron pareja al quedar en libertad y se fueron a vivir a una zona rural de Bélgica.
Allí comenzó en diciembre de 1987 una trayectoria de asesinatos por la zona fronteriza, que no terminó hasta su detención en 2003, aunque uno de los crímenes ocurrió en Nantes (costa atlántica).