Alemania y Francia, mediadores en las tensiones entre Rusia y Ucrania, hicieron un llamado “a la moderación” y a la “desescalada inmediata” entre ambos países este sábado, ante el “número creciente de violaciones del alto el fuego”.
Reafirmando su “apoyo a la soberanía y a la integridad territorial de Ucrania” en un comunicado conjunto, los diplomáticos de ambos países se declararon “preocupados por el número creciente de violaciones del alto el fuego”, pese a que “la situación en el este de Ucrania se hubiera estabilizado desde julio de 2020”.
Berlín y París pidieron “a las partes que demuestren moderación y procedan a una desescalada inmediata”, afirmando que seguían “con una gran vigilancia la situación, en particular los movimientos de fuerzas rusas”.
En los últimos días, responsables ucranianos y estadounidenses manifestaron su preocupación por el despliegue de miles de soldados y de material ruso en la frontera entre Rusia y Ucrania.
El presidente estadounidense, Joe Biden, prometió a Kiev su apoyo “inquebrantable” frente a la “agresión de Rusia”, considerada como un socio militar de los separatistas, algo que Moscú niega.
El ejército ruso también anunció el viernes maniobras militares destinadas a simular una defensa frente a un ataque con drones en una región cercana a Ucrania.
Tras la tregua de la segunda mitad de 2020, el conflicto en el este de Ucrania ha registrado desde enero varios enfrentamientos armados que han causado la muerte de 20 soldados ucranianos. Ambos bandos se culpan mutuamente de la escalada.
La guerra en el este de Ucrania estalló en 2014, después de que Rusia anexara Crimea, y según la ONU, se ha cobrado más de 13.000 vidas.
A pesar de los acuerdos de paz firmados en Minsk en 2015 y de varias reuniones entre los dirigentes ruso y ucraniano apadrinadas por Alemania y Francia, el conflicto está estancado.