En una extensa reunión de 11 horas en la que participaron 16 estados federados también se acordó prolongar las medidas contra la pandemia hasta el 18 de abril.
La mayoría de los comercios cerrarán y los oficios religiosos se cancelarán en Semana Santa, del 1 al 5 de abril.
Así se reforzarán las restricciones vigentes en Alemania, para detener el aumento de contagios por covid-19, anunció la canciller Angela Merkel.
Las reuniones y las comidas al aire libre quedan prohibidas del 1 al 5 de abril. Solo las tiendas de alimentación podrán abrir el día 3. Muchas de las restricciones en vigor desde finales de 2020 se prolongan hasta el 18 de abril, precisó la canciller.
Merkel y los jefes de gobierno de los 16 estados federados tomaron esa y otras decisiones, donde se endureció todas las restricciones de la vida pública y la actividad económica.
Además, Alemania obligará a todos los viajeros a hacerse un test PCR negativo al llegar al país desde cualquier lugar del mundo, aunque no sea considerado zona de riesgo.
La decisión sobre los viajes desde el extranjero está relacionada con la polémica en torno a las vacaciones de Semana Santa en Mallorca.
La demanda se había disparado después de que las autoridades alemanas sacasen a las Islas Baleares de la lista de zonas de riesgo. Esto eliminaba la obligación de presentar una prueba PCR y guardar cuarentena.
Se establece así una “obligación general” de realizarse un test para entrar al país. La medida sustituye el sistema anterior, en el que sólo las zonas de riesgo, aunque eran la inmensa mayoría de los países del mundo, implicaban test y cuarentena.
Test previo a ingresar a Alemania
“Desaconsejamos todos los viajes al extranjero, en general todos los viajes que no son estrictamente necesarios”, señaló Angela Merkel.
La canciller explicó que el Gobierno alemán se ha puesto en contacto con las aerolíneas del país para que todos los viajeros que regresen a Alemania tras las vacaciones de Semana Santa, independientemente del lugar de partida, se hagan un test “antes del vuelo”. Quedan por perfilarse los detalles de esta medida.
Merkel reconoció que en Mallorca hay alojamientos turísticos abiertos, en contraste con Alemania, aunque apuntó que el Gobierno balear acaba de modificar las restricciones y podría volver a hacerlo en los próximos días.
Señaló además que el Gobierno alemán seguirá con atención la situación en la isla y los posibles “riesgos”, entre los que señaló la aparición de la variante del coronavirus detectada por primera vez en Brasil.