El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha informado de que recibirá este viernes la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 y que será inmunizado con el fármaco desarrollado por AstraZeneca y Oxford.
En rueda de prensa, el líder británico ha vuelto a defender la seguridad de la vacuna, y ha recordado que la autoridad regulatoria del país y la Agencia Europea del Medicamento (EMA) se han expresado también en este sentido.
“La vacuna de AstraZeneca es segura y la vacuna de Pfizer es segura”, ha señalado, subrayando que “lo que no es seguro es contraer el virus”. “Las vacunas son el camino hacia la seguridad de la población”, ha reiterado, según ha informado el diario británico ‘The Guardian’.
Mientras, el Ministerio de Salud de Reino Unido ha registrado este jueves 95 fallecidos a causa de la COVID-19, mientras que ha contabilizado 6.303 nuevos contagios en las últimas 24 horas.
Con estas cifras, el balance del país europeo se ha elevado hasta las 125.926 víctimas mortales a causa de la enfermedad desde que comenzó la pandemia y hasta las 4.280.882 personas contagiadas.
En referencia a la situación hospitalaria, las autoridades sanitarias británicas han detallado que 426 personas han requerido un ingreso durante la jornada. Hasta el momento, 7.218 personas permanecen hospitalizadas en Reino Unido con COVID-19, 968 de las cuales necesitan respiración mecánica.
Por su parte, más de 25,7 millones de personas han recibido la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19, mientras que más de 1,8 millones han sido inoculadas también con la segunda.
En referencia a la vacunación en Reino Unido, el ministro de Salud británico, Matt Hancock, ha asegurado que los retrasos en el suministro de vacunas previstos para abril no afectarán a las segundas dosis a administrar y tampoco a la ‘hoja de ruta’ del desconfinamiento en el país.
“Estamos en el camino de las fechas en la ‘hoja de ruta’ y no hay ningún impacto”, ha garantizado en una intervención ante la Cámara de los Comunes, donde también ha informado de que las autoridades han pausado un lote de 1,7 millones de dosis para analizarlo, según ha informado la BBC.