El estado de salud de Alexéi Navalny, envenenado con Novichok, sigue mejorando y el opositor ruso puede ahora levantarse de su cama, anunció el lunes el hospital berlinés donde es atendido.
El principal opositor al presidente ruso Vladimir Putin, víctima de un envenenamiento el 20 de agosto en Siberia, según sus allegados, podrá pronto salir de la “ventilación artificial”, agregó el hospital Charité, que ya no menciona eventuales secuelas a largo plazo.
El gobierno alemán reiteró “el llamado a Rusia para que aporte explicaciones sobre lo que pasó”, advirtió el portavoz del gobierno de Angela Merkel, Steffen Seibert.
Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, mantuvo una conversación con su homólogo ruso, Vladimir Putin, y le instó a “arrojar la luz, sin demora” sobre el “intento de asesinato” del opositor.
Para el mandatario ruso, estas acusaciones no tienen ni “apoyo ni fundamento”.
Navalny, un abogado de 44 años que denuncia desde hace tiempo la corrupción en las élites rusas, está hospitalizado en Berlín por envenenamiento desde el 22 de agosto.
Tras salir del coma tres semanas después, su estado de salud ha ido mejorando, y este lunes el hospital Charité donde está ingresado indicó que “al paciente se le ha retirado de manera exitosa la ventilación mecánica”. “Es capaz de levantarse de la cama por breves periodos de tiempo”, agregó el establecimiento.
Arma química
Un laboratorio militar alemán concluyó el 3 de septiembre que el opositor ruso fue envenenado con un potente agente neurotóxico, unas afirmaciones que Moscú niega.
Seibert señaló el lunes que Alemania pidió a Francia y Suecia “una revisión independiente de las pruebas alemanas a partir de nuevas muestras de Navalny”.
“Los resultados de esta revisión en laboratorios especializados de Francia y Suecia están disponibles y confirman las pruebas alemanas”, dijo el vocero de Merkel.
En Suecia analizó las muestras la Agencia de Investigación sobre Defensa, un laboratorio especializado en sustancias altamente tóxicas.
Además de Rusia, “es poco probable que otro país firmante de la Convención [sobre las Armas Químicas] pueda obtener” este agente neurotóxico, comentó a la AFP Asa Scott, jefa de la división para la defensa y la seguridad en esta agencia.
Con el laboratorio militar alemán, ya son “tres laboratorios los que han presentado de manera independiente la prueba de que un agente neurotóxico del grupo Novichok es la causa del envenenamiento de Navalni”, resumió Seibert.
Esta sustancia altamente tóxica ya fue utilizada contra el exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia en 2018 en Inglaterra, según las autoridades británicas.
Creado por los soviéticos en los años 1970 como arma química, este agente se presenta normalmente como un polvo que puede penetrar en los poros de la piel o las vías respiratorias.
El uso de Novichok “constituye una violación grave de la Convención sobre las Armas Químicas”, recordó el vocero del gobierno alemán.
Por ello, Berlín solicitó a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OIAC) para el análisis de las pruebas en el caso Navalni, añadió.
La OIAC “extrajo muestras de Navalny y tomó las medidas necesarias para hacerlas analizar en los laboratorios de referencia de la OIAC”, precisó.
Victoria simbólica
“Estamos en estrecha colaboración con nuestros socios europeos en lo que concierne a las próximas etapas”, concluyó Seibert.
La cuestión de las sanciones sigue sobre la mesa, igual que el futuro del proyecto del gasoducto Nord Stream 2, entre Rusia y varios países europeos, principalmente Alemania.
El lunes, Putin reclamó de nuevo que Berlín facilite “las muestras biológicas” que permitieron a los especialistas alemanes afirmar que se trataba de una sustancia de la familia del Novichok.
Según las autoridades rusas, los análisis realizados durante la hospitalización de urgencia de Navalny en Omsk (Siberia), no revelaron la existencia de ninguna sustancia tóxica en el organismo del activista.
El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, renunció a una visita a Alemania prevista el martes, argumentando según sus servicios que su homólogo alemán Heiko Maas redujo el encuentro a hora y media y anuló su participación en un evento organizado en el marco del año ruso-alemán.