Las autoridades bielorrusas anunciaron el jueves la apertura de una causa penal por “atentado contra la seguridad nacional” contra el “consejo de coordinación” formado por la oposición y destinado a impulsar una transición en el poder tras las presidenciales del 9 de agosto.
“La creación y las actividades de este consejo tienen por fin hacerse con el poder y atentar contra la seguridad nacional de Bielorrusia”, declaró en un video difundido en la red social Telegram, el fiscal general, Alexandre Koniuk.
Según había anunciado previamente la lideresa opositora, Svetlana Tijanovskaia, la oposición formó dicho “consejo de coordinación” para “facilitar la transición pacífica del poder mediante el diálogo”, presidido por la premio Nobel de Literatura Svetlana Alexievitch.
El jefe de la diplomacia polaca Jacek Czaputowicz recibió en Varsovia a Véronika Tsepkalo, una de las aliadas de Tijanovskaia, y su marido, el opositor Valéri Tsepkalo, y les prometió “apoyo” a la sociedad civil bielorrusa, según un tuit del ministerio polaco de Relaciones Exteriores.
Presión interna y externa
El anuncio llega en momentos de altas presiones contra Lukashenko, luego que la La UE rechazara su polémica reelección, mientras que el mandatario promete y exige por su parte mano dura para sofocar las protestas internas.
La crisis en Bielorrusia fue objeto de una cumbre extraordinaria de la UE tras la cual el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, prometió sanciones suplementarias a varios dirigentes del régimen, acusados de “violencia, represión y fraude electoral”.
La UE “apoya con firmeza el derecho del pueblo bielorruso a determinar su futuro” y se dispone a aplicar “en breve” sanciones contra un número “sustancial” de responsables del régimen, dijo Michel.
Lukashenko, quien gobierna Bielorrusia desde hace 26 años, enfrenta protestas cotidianas en su país desde la elección, que afirma haber ganado con el 80% de votos.