Bielorrusia anunció este miércoles la detención de 32 “combatientes” rusos del grupo militar privado Wagner, considerado cercano al Kremlin, que habían llegado para “desestabilizar” al país durante el periodo previo a las presidenciales del 9 de agosto.
La principal cadena televisiva bielorrusa y la agencia oficial de noticias Belta anunciaron estos arrestos, ordenados después de que las autoridades tuvieran información de “la llegada al territorio de 200 combatientes con el objetivo de desestabilizar la situación durante la campaña electoral”.
“Por la noche, las fuerzas del orden bielorrusas detuvieron a 32 combatientes del grupo militar privado Wagner. Además, otro hombre fue detectado y arrestado en el sur del país”, señaló Belta.
La televisión bielorrusa mostró imágenes filmadas por cámaras de video-vigilancia de su llegada en grupo a un hotel cercano a la capital, Minsk, tras lo que se produjo su arresto.
Llevaban consigo fajos de billetes de dólares, pasaportes rusos, y manuales de uso militar. El grupo llamó la atención en el hotel por su comportamiento diferente a los turistas rusos clásicos. Vestían uniformes de estilo militar, “no bebían alcohol, ni frecuentaban lugares de ocio y diversión”. Además, cada uno de ellos portaba tres grandes valijas de color negro.
El presidente bielorruso pidió explicaciones
En tanto, el mandatario de Bielorrusia, Alexandre Lukashenko, pidió explicaciones a Moscú tras la detención de más de 30 presuntos combatientes rusos antes de las elecciones presidenciales.
“Es necesario pedir explicaciones inmediatamente a las estructuras rusas apropiadas” dijo Lukashenko, citado por la televisión pública STV, durante una reunión del consejo de seguridad bielorruso.