Baltasar Garzón, el abogado español de Julian Assange, afirmó que el fundador de WikiLeaks fue espiado como “en un película” cuando estuvo refugiado en la embajada de Ecuador en Londres.
Julian Assange denunció a la empresa española Undercover Global, a la que acusa de haberlo espiado durante años por cuenta de Estados Unidos cuando se encontraba asilado en la embajada ecuatoriana en Londres, donde permaneció entre 2012 y 2019.
Dicha firma estuvo parte de ese tiempo encargada de la seguridad de la legación diplomática.
“Se podría decir que ocurre realmente en las películas de espías, pero es que esto no es una película de espías”, dijo a la prensa el ex juez Garzón a su salida de la Audiencia Nacional en Madrid, donde tuvo que declarar este lunes para defender a su cliente.
Es “algo escandaloso”, añadió Garzón, refiriéndose a las imágenes de videovigilancia que se le mostraron, y en las que se ve al informático australiano en la embajada ecuatoriana hablando con sus abogados.
Según la denuncia presentada por Assange, la empresa española colocó micrófonos y cámaras en distintos puntos de la embajada, e incluso en el baño de mujeres, donde el australiano organizaba muchos de sus encuentros. También había micrófonos en la base de los extintores, de acuerdo con la denuncia.
La defensa de Assange, actualmente encarcelado en Londres, espera que la causa por espionaje en España lo ayude en el procedimiento de extradición lanzado en su contra por Estados Unidos.
Y es que el informático, de 49 años, se expone a una pena de cárcel de 175 años por haber difundido desde 2010 más de 700.000 documentos clasificados sobre actividades militares y diplomáticas de Estados Unidos en Irak, Afganistán y muchos otros países.
“Hemos puesto a disposición de las autoridades judiciales británicas todo este material, porque tienen una incidencia directa respecto de la extradición y demuestran desde nuestro punto de vista que Julian Assange ha sido objeto de una persecución política”, añadió Baltasar Garzón, coordinador de la defensa de Assange en España.
La justicia española escuchó también este lunes los testimonios de Stella Morris, abogada de Assange y madre de dos hijos suyos, y de Fidel Narváez, ex consul de Ecuador en Londres.
“Julian está mal, pero un poco mejor, digamos, a la espera de la continuidad del proceso de extradición” en Estados Unidos, que debe reanudarse el 7 de septiembre, agregó Garzón.
También en el marco de este caso de presunto espionaje, la justicia española admitió a trámite en junio una denuncia del ex presidente ecuatoriano Rafael Correa contra Undercover Global.
En ella, Correa acusa a la empresa de haberlo seguido y haber tomado fotos de sus encuentros con Baltasar Garzón.