El gobierno británico anunció este martes la prohibición a los operadores de telecomunicaciones de comprar nuevos equipamientos para sus redes 5G al grupo chino Huawei a partir de finales de este año e impondrá que se retiren todos los antiguos antes de 2027.
Al hacer este anuncio ante la Cámara de los Comunes, el ministro de Cultura y sector Digital, Oliver Dowden, justificó la decisión por la “incertidumbre” que causan las sanciones anunciadas en mayo por Washington contra Huawei para impedirle el acceso a los semiconductores fabricados con componentes estadounidenses.
Huawei respondió, calificando de “politizada” y “decepcionante” su exclusión de la red 5G británica.
“Lamentablemente nuestro futuro en el Reino Unido ha sido politizado, esta es una cuestión de política comercial de Estados Unidos y no de seguridad”, afirmó el portavoz de Huawei en Londres, Ed Brewster, declarándose “decepcionado” por una decisión que “amenaza con ralentizar el desarrollo digital” del país y “aumentar las facturas” de los usuarios dado que los equipos de sus competidores son más caros.