Los jefes de gobierno español e italiano mostraron este miércoles su voluntad común de convencer a los países llamados “frugales” para adoptar lo más rápido posible el plan de reimpulso europeo destinado a superar la crisis provocada por la pandemia.
Los dirigentes europeos negocian para alcanzar un acuerdo para crear un plan de relanzamiento de 750.000 millones de euros propuesto por la Comisión Europea, con una cumbre en Bruselas el 17 y 18 de julio para adoptar este plan por unanimidad.
Este fondo, que beneficiará en mayor medida países como Italia o España, dos de los más impactados por la pandemia, suscita reservas en los cuatro “frugales”: Países Bajos, Austria, Suecia y Dinamarca.
“La próxima semana tendré la ocasión de visitar al primer ministro (holandés Mark) Rutte, y también al primer ministro sueco Stefan Löfven y a la canciller (alemana Angela) Merkel”, dijo el jefe de gobierno español Pedro Sánchez en una rueda de prensa con su homólogo italiano Giuseppe Conte.
“Con los frugales hacemos una labor diplomática (…) y podemos convencerles de cara a la cumbre del 17 de julio”, indicó. “Julio tiene que ser el mes del acuerdo”, añadió.
Conte también tiene previsto viajar a La Haya (Países Bajos) el viernes y a Berlín el lunes. Los dos se vieron previamente con el primer ministro portugués Antonio Costas, también alineado con Roma y Madrid.
“Hablamos del futuro de Europa (…) El mercado único europeo está en juego (…) Sin una respuesta fuerte, coordinada y europea, destruiremos el mercado único”, advirtió a los países reticentes sobre las potenciales consecuencias negativas que puede tener no desplegar este fondo para el conjunto de las economías europeas.
“Es por ello que Europa debe reaccionar enseguida y unida (…) No podemos permitirnos ser demasiado prudentes”, insistió el dirigente italiano.