El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, anunció este jueves el lanzamiento el viernes del proceso de un reglamento europeo de 1996 para neutralizar los efectos extraterritoriales en el bloque de las sanciones estadounidenses contra Irán.
“Debemos actuar ahora” y “lo haremos mañana por la mañana a las 10:30 (05:30 de Chile)”, dijo Juncker en Sofía, un día después de una cena de trabajo de mandatarios europeos en la que acordaron una posición unitaria para responder a la salida de Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán.
La Unión Europea (UE) busca así proteger sus intereses económicos vinculados a la reanudación de los intercambios comerciales con Teherán, con este reglamento creado inicialmente para eludir la ley Helms-Burton de 1996 que aplicaba sanciones a empresas que comerciaban con Cuba.
El reglamento permite a las empresas y a los tribunales europeos evitar someterse a las leyes de sanciones adoptadas por terceros países, y estipula que las decisiones de tribunales extranjeros en base a esas leyes no tienen ningún efecto en la UE.
La eficacia de esta ley no se llegó a comprobar realmente, en virtud de un entendimiento en 1997 entre Washington y el bloque europeo por el cual este último renunciaba a llevar el caso ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) a cambio de dejar fuera de su aplicación a sus empresas.
El presidente francés, Emmanuel Macron, evocó también a su llegada a Sofía que el reglamento de 1996 podría ser “revisado y ampliado” para afrontar el eventual efecto extraterritorial de sanciones estadounidenses contra Irán.
Ésta no es la única alternativa que estudia la UE. El primer ministro belga, Charles Michel, planteó también la posibilidad de ampliar el mandato del Banco Europeo de Inversiones (BEI) “para apoyar a los sectores económicos” y una mejor coordinación para proteger las inversiones a nivel europeo.
La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, rechazó el martes hacer paralelismos entre los casos de Irán y Cuba, tras la primera reunión con su par cubano, Bruno Rodríguez, en el marco del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación vigente entre ambos desde noviembre.
“Los dos países son muy diferentes entre sí”, dijo en rueda de prensa la ex canciller italiana, para quien, no obstante, “un enfoque europeo consolidado a la hora de defender y proteger los intereses económicos europeos”.