Este domingo comienza a regir en Nueva York –EEUU– el polémico peaje de 9 dólares que los conductores deberán pagar para entrar al centro de Manhattan. La medida sigue generando crítica y Donald Trump ya anunció que la revocaría.
El precio varía en función de diversos factores. Por ejemplo, si el conductor tiene una tarjeta llamada E-Z Pass, en hora punta pagará 9 dólares y por la noche 2,25; mientras que quien no disponga de esta ficha pagará 13,50 dólares en hora punta y 3,30 dólares por la noche.
Serán cámaras de video situadas en los puentes y túneles de entrada a Manhattan los que grabarán a cada vehículo y harán llegar sus facturas al propietario por vía electrónica.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha indicado que el peaje mejorará la calidad del aire en Manhattan, aliviará sus avenidas colapsadas durante varias horas al día y se utilizará para financiar a la empresa metropolitana de transportes (MTA), que gestiona el metro y los autobuses.
Pero sus argumentos no han servido para convencer a muchos vecinos de la Gran Manzana y de otros estados colindantes, que dudan de que el impuesto vaya a ser efectivo.
Críticas a peaje
Muchos conductores cuestionan que el dinero vaya a ayudar al sistema de metro de la ciudad, que en las últimas semanas ha sido el epicentro de varios episodios violentos, entre ellos un hombre que empujó a las vías a otro pasajero y un viajero que quemó viva a una mujer que finalmente murió.
En este sentido, Parson Shwan comentó en una publicación de la MTA que, con el peaje, “ahora tendremos más gente en el metro preocupada por si alguien les prende fuego en el tren”. “Si quieres aumentar las tasas de la MTA, invierte más dinero en medidas preventivas de seguridad”.
Entre los opositores a la medida también está el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy, que ha solicitado a un juez federal bloquear temporalmente la medida, pero el magistrado falló que el peaje es completamente legal.
Donald Trump revocaría peaje
Por su parte, el presidente electo, Donald Trump, también ha terciado en el debate y ha calificado el peaje como “el impuesto más regresivo jamás conocido por la humanidad”.
Es más, aseguró que lo revocaría una vez que asuma en la Casa Blanca el próximo 20 de enero.