Elon Musk utilizó su cuenta en X para insistir en que la explosión del Tesla Cybertruck frente al Trump Hotel de Las Vegas se debió a un atentado terrorista, asegurando que las características del vehículo ayudaron a aminorar los efectos del estallido.
“Hemos confirmado que la explosión fue causada por pirotecnia de alto calibre y/o una bomba transportada en la caja del Cybertruck arrendado”, señaló el propietario de Tesla.
En ese sentido, remarcó que la explosión “no está relacionada con el vehículo en sí” y que “toda la telemetría del vehículo era normal en el momento de la explosión”. En otra publicación, el magnate apuntó directamente contra los autores del hecho.
“Los malvados imbéciles eligieron el vehículo equivocado para un ataque terrorista. El Cybertruck contuvo la explosión y la dirigió hacia arriba”, escribió. “Ni siquiera las puertas de cristal del hotel se quebraron”, puntualizó.
La Policía de Las Vegas confirmó que el automóvil iba cargado de cilindros de gas, cilindros de combustible para camping y morteros de pirotecnia de alto calibre.
El sheriff de la Policía de Las Vegas, Kevin McMahill, declaró en una rueda de prensa que el hecho de que el vehículo implicado fuera una Cybertruck de Tesla “realmente limitó los daños ocasionados”.
McMahill constató que la onda explosiva “salió hacia arriba” sin “ni siquiera romper las puertas de vidrio del frente del Trump Hotel”, mientras que el exterior del Cybertruck quedó prácticamente “intacto”.
El hecho tuvo lugar a las 8:40 hora local (13:40 hora de Chile) del miércoles 1 de enero, cuando el vehículo explotó en la entrada del Trump Hotel en Las Vegas, dejando un muerto -el conductor- además de otras siete personas heridas.
El Cybertruck de Tesla se había estacionado en la zona de ‘valet’ del hotel pocos segundos antes. Las autoridades están investigando lo ocurrido como un posible acto terrorista.
Según informó ABC News, una fuente reveló que el vehículo llevaba en su interior “una carga de morteros tipo fuegos artificiales“.
Este incidente se reportó sólo un par de horas después de que un sujeto, identificado como Shamsud-Din Bahar Jabbar, atropellara a un grupo de personas que celebraba el Año nuevo en la intersección entre Canal Street con Bourbon Street en Nueva Orleans, dejando al menos 15 muertos y 30 heridos.
Luego de embestir a la multitud, Jabbar se bajó de la camioneta y comenzó a disparar en contra de los presentes antes de ser abatido por agentes policiales.
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