Israel ofreció a Hamás una nueva propuesta de acuerdo para un alto el fuego duradero en la ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza a cambio de la liberación de todos los rehenes que el grupo islamista palestino mantiene secuestrados, anunció este viernes el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
“Después de una intensa actividad diplomática, llevada a cabo por mi equipo, en conversaciones con líderes de Israel, Catar, Egipto y otros países de Oriente Medio, Israel ha ofrecido una nueva propuesta integral para un alto el fuego duradero y la liberación de todos los rehenes”, dijo en una comparecencia en la Casa Blanca.
Según el mandatario, la propuesta, que ya ha sido enviada a Hamás a través de la intermediación de Catar, tendría tres fases.
La primera constaría de seis semanas en las que habría un alto al fuego completo, se retirarían las tropas israelíes de todas las áreas pobladas de la Franja y serían liberados varios rehenes, entre ellos mujeres, ancianos y heridos, a cambio de la excarcelación de centenares de prisioneros palestinos.
Durante esas seis semanas, Israel y Hamás deberían negociar los detalles de la segunda fase, que implicaría “el final permanente de las hostilidades”, la liberación del resto de rehenes, incluidos soldados, y la retirada del Ejército israelí de la Franja, detalló Biden.
Según el mandatario estadounidense, esta segunda etapa necesitaría una negociación muy intensa, de manera que “el alto el fuego continuará vigente siempre que las conversaciones se mantengan”, dijo.
La tercera y última fase comprendería un “gran plan de reconstrucción” del enclave palestino y la devolución de los cuerpos de los rehenes asesinados.
“Esta es la oferta que está ahora sobre la mesa. Es lo que hemos estado pidiendo y lo que se necesita”, reivindicó Biden en una comparecencia anunciada este mismo viernes y centrada en la situación en Oriente Medio.
Una fuente de la Administración estadounidense recalcó en una llamada posterior con periodistas que el nuevo plan no se aleja mucho de lo que Hamás dijo estar dispuesto a aceptar hace poco: “Hamás dice que quiere un alto el fuego y este acuerdo es una oportunidad para demostrar que lo dice en serio”, añadió.
Según la misma, Israel ha sido capaz de ofrecer este plan por algunos de los éxitos que ha tenido para degradar la capacidad militar de Hamás, que en su opinión ya no sería capaz de repetir un ataque como el del 7 de octubre.
Este plan es “el mejor camino” tanto para la crisis de Gaza como para garantizar la seguridad de Israel ahora y a largo plazo, e incluye acuerdos para permitir que los palestinos vuelvan a sus casas y puedan empezar a reconstruir su enclave junto con la comunidad internacional y socios árabes.
Para cuando se llegara a la segunda y tercera fase, tal y como se destacó, Israel ya contaría con las garantías necesarias sobre su propia seguridad y sobre el hecho de que Hamás ya no pueda ser una “plataforma de terrorismo”.
La fuente gubernamental subrayó que la Administración estadounidense, junto con Egipto y Catar, hará “todo lo que pueda” para garantizar que Israel cumple sus compromisos, y que desde Egipto se velará también para que Hamás aplique los suyos.