Estados Unidos reactivará las Fuerzas Marítimas Combinadas (CMF), para contrarrestar los ataques de los rebeldes hutíes de Yemen que han afectado el paso de embarcaciones en el mar Rojo.
Así lo explicó el portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, John Kirby, después de que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, anunciara una reunión con países de Oriente Medio para abordar los ataques hutíes.
EEUU está trabajando para “reforzar e impulsar” la coalición, integrada por 39 países, entre ellos EEUU, Egipto, Arabia Saudí y Emiratos Árabes, señaló Kirby en una rueda de prensa telefónica.
La Administración de Joe Biden quiere activar esta fuerza “de una manera en la que no ha sido usada antes”, agregó el portavoz.
La CMF, comandada por el almirante de la marítima estadounidense Brad Cooper, está compuesta por varios grupos de trabajo y uno de ellos está dedicado específicamente a la seguridad en el mar Rojo.
Los 39 Estados miembros buscan proteger el flujo comercial, mejorar la seguridad marítima en las diferentes regiones donde tiene presencia.
Cada nación puede decidir de qué manera contribuir y no existe un mandato político o militar vinculante.
Estados Unidos busca una “coalición verdaderamente internacional”
El jefe del Pentágono, quien se encuentra de visita en Israel, convocó una reunión para mañana con ministros de la región y otros países para abordar la situación en el mar Rojo.
La pasada semana el presidente de Israel, Isaac Herzog, reclamó “una coalición verdaderamente internacional” para combatir a los rebeldes hutíes de Yemen.
Lo anterior, para que las acciones encabezadas por Estados Unidos sean “impulsadas y fortalecidas”.
Tras el estallido de la guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás en Gaza, los hutíes, respaldados por Irán, han lanzado varias andanadas de misiles y drones contra el sur de Israel en estos dos últimos meses.
A lo anterior se suman además ataques contra buques con la bandera del Estado judío o propiedad de empresas israelíes en el mar Rojo y el estrecho de Bab al Mandeb.
Desde el pasado viernes, los principales grupos de transporte marítimo han ido anunciando que suspenden sus operaciones en el mar Rojo, entre ellos Maersk y Hapag-Lloyd.
Hoy a las empresas anteriores se les sumó la petrolera BP, al cancelar temporalmente el paso de sus embarcaciones por la zona.