Las autoridades norteamericanas trabajan intensamente para dar con el paradero de Robert Card, quien a las 18:56 hora local (19:56 hora de Chile) del miércoles entró en un salón de bowling de la localidad de Lewiston fuertemente armado, disparando contra los presentes.
Posteriormente se dirigió a un restaurant de la misma ciudad, la segunda más poblada del estado de Maine, para atacar a los comensales.
Tras ser alertados, la policía comenzó una frenética búsqueda para hallar a Card. Por el momento sólo han podido encontrar su vehículo en Lisbon, a unos 12 kilómetros de Lewiston.
En total, según la gobernadora de Maine, Janet Mills, los dos atentados han dejado 18 fallecidos y 13 heridos.
Lo que se sabe de Robert Card
Con el paso de las horas se han ido conociendo nuevos detalles sobre Card, quien se mantiene prófugo.
Nacido el 4 de abril de 1983 en Bowdoin, Card es instructor en el manejo de armas de fuego. De acuerdo a Agencia EFE, además es militar en la reserva de 40 años.
Una ficha divulgada por el Centro de Análisis y de Información de Maine, en tanto, revela que estuvo internado por dos semanas en una institución mental, tras lo cual recibió el alta. Hasta ahora no se sabe qué tratamiento en específico recibió.
El portal NBC News detalla que anteriormente el atacante afirmó haber “oído voces”, amenazando con disparar hacia la Base de la Guardia Nacional en Saco.
El sujeto ingresó a la Universidad de Maine para estudiar Tecnología de Ingeniería de 2001 a 2004, aunque nunca se graduó.
En conversación con la cadena Fox News, el portavoz del Ejército, Bryce Dubee, confirmó que el hombre ha sido reservista desde diciembre de 2002.
Incluso, añadió, ha recibido diversos premios por su servicio. Sin embargo, nunca fue desplegado en combate.
No se descarta que el hombre, quien fue captado por cámaras de seguridad y rastreado con sistemas de reconocimiento facial, haya huido a Canadá, considerando la cercanía que existe entre dicho país y el estado de Maine.
“Nada de esto parece real, pero lamentablemente lo es”, señaló a través de sus redes sociales el salón de bowling en el que Card ingresó para atacar.
“Estamos devastados por nuestra comunidad y nuestro personal. Anoche perdimos a algunas personas increíbles de buen corazón de nuestra familia y comunidad de bolos. No hay palabras para arreglar esto o mejorarlo”, agregó.
“Estamos orando por todos los que han sido afectados por esta horrible tragedia. Los amamos a todos y los mantenemos cerca de nuestros corazones”, detalló el salón.