La jueza estadounidense Tanya S. Chutkan, encargada del proceso contra Donald Trump (2017-2021) por intentar anular las elecciones de 2020, decidió este lunes que la fecha del juicio sea el 4 de marzo de 2024. Rápidamente el exmandatario criticó el día elegido.
La magistrada, quien juzgará el caso que culminó con el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, hizo el anuncio tras una audiencia celebrada en la capital estadounidense, informó la prensa.
Tras conocerse la fecha, el equipo del expresidente estadounidense afirmó que el día elegido por la jueza para comenzar el juicio en su contra por intentar anular las elecciones de 2020 lo priva del derecho a tener un proceso justo.
“La fecha fijada hoy priva al presidente Trump de su derecho constitucional a un juicio justo, un principio fundamental de Estados Unidos, y continúa exponiendo la corrupción y la caza de brujas que se está lanzando”, afirmó a través de un comunicado un portavoz del exmandatario.
En un mensaje a través de su red social Truth Social, Trump informó que va a apelar la decisión de la jueza y volvió a insistir en que el gobierno de Joe Biden está llevando a cabo una “caza de brujas” en su contra.
Con su decisión, Chutkan desestimó el deseo del fiscal especial, Jack Smith, de que el juicio arrancara en enero de 2024, en una fecha cercana al aniversario del asalto al Capitolio.
También el interés de la defensa del expresidente de posponer el proceso hasta después de las próximas elecciones presidenciales, que se celebrarán en noviembre de 2024 y en las que Trump es todavía el precandidato republicano favorito. Habían pedido que el juicio iniciara en abril de 2026.
En su intervención de hoy la jueza afirmó que no iba a permitir que la agenda política de Trump -que tiene cuatro procesos penales abiertos- dictara el calendario del juicio.
“Si este caso involucrara a una atleta profesional, por ejemplo, sería inapropiado fijar la fecha del juicio basándose en su calendario de juegos”, afirmó Chutkan, quien aseguró que el cronograma propuesto por Trump iba “mucho más allá de lo necesario” para preparar el caso.
El exmandatario está acusado en Washington DC de cuatro cargos: conspiración para defraudar a EE.UU., conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra derechos.
Por el primero de esos cargos le podría caer una pena máxima de cinco años de cárcel, por el segundo y el tercero veinte años de prisión, respectivamente, y por el cuarto, diez años.
El anuncio de este lunes llegó unos minutos después de que se conociera que la lectura de cargos contra el expresidente y otros 18 imputados en Georgia por intentar revertir los resultados de las elecciones de 2020 en ese estado tendrá lugar el próximo 6 de septiembre.
Trump se ha declarado no culpable en los otros tres casos penales en los que también está imputado: por los pagos irregulares a la actriz porno Stormy Daniels para silenciar durante la campaña de 2016 su “affaire” en el pasado, por llevarse ilegalmente de la Casa Blanca papeles clasificados al abandonar el poder y por el asalto al Capitolio.
El expresidente acudió a Georgia el pasado jueves para que lo ficharan y le hicieran la fotografía policial. Estuvo en la cárcel del condado de Fulton apenas 20 minutos y quedó en libertad bajo fianza de 200.000 dólares.
La fiscal encargada del caso, la demócrata Fani Willis, propuso ese mismo día a la corte que el juicio arranque el 23 de octubre y no el 4 de marzo del año que viene, tal y como había planteado en un principio.
El inicio del proceso contra Trump por los pagos irregulares a la actriz porno Stormy Daniels está fijado para el 25 de marzo de 2024 en Nueva York.
Mientras, el juicio en Florida por los papeles clasificados está programado para el 20 de mayo de 2024, cuando faltarán poco más de 6 meses para las elecciones presidenciales.