Un tribunal estadounidense decidió este miércoles que el expresidente Donald Trump (2017-2021) no puede impedir que el que fuera su vicepresidente, Mike Pence, declare ante el gran jurado que investiga el papel del exmandatario durante el asalto al Capitolio de 2021.
La decisión llega después de que Trump tratara de evitar la declaración de Pence alegando que los sucesos de aquel día están cubiertos por el “privilegio ejecutivo”, el derecho de los presidentes a mantener comunicaciones confidenciales.
En un primer momento, fue el propio Pence quien apeló la decisión del gran jurado que investiga el asalto al Capitolio de citarle a declarar, pero accedió una vez que un juez de Washington falló que los posibles actos ilegales de Trump durante el 6 de enero de 2021 no están protegidos por el derecho a la confidencialidad de los legisladores.
Según el medio The Washington Post, el exvicepresidente puede ofrecer información relacionada con las conversaciones que tuvo con el exmandatario y sus asesores el día del ataque, y sobre la sugerencia del abogado de Trump John Eastman de que Pence podría haber impedido la confirmación de la victoria electoral de Joe Biden.
La investigación del gran jurado sobre el ataque al Capitolio es solo uno de los líos legales en que está envuelto el exmandatario conservador, que el pasado marzo fue acusado por otro gran jurado, en Nueva York, por el caso de los pagos a la actriz porno Stormy Daniels.
Además, la fiscalía del condado de Fulton, en Georgia, investiga si Trump trató de invalidar los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en el estado, mientras que otro gran jurado, este en la capital estadounidense, Washington, revisa el caso de los documentos clasificados encontrados en su residencia de Florida.
Trump ya anunció en noviembre su intención de competir por la nominación republicana para las elecciones de 2024, mientras que se espera que Mike Pence haga lo propio próximamente.