Nueve personas murieron en el derrumbe parcial de un edificio en Surfside, en Florida, donde rescatistas israelíes y mexicanos trabajan contra reloj junto a sus colegas estadounidenses para encontrar a más de 150 desaparecidos en la catástrofe ocurrida el jueves, según el último balance del domingo.
El panorama se torna cada vez más sombrío a medida que avanza la lenta operación de rescate, que involucra a trabajadores que se mueven sin parar entre los escombros en medio de un calor tórrido y una alta humedad.
Tras haber hallado cinco cadáveres, “encontramos otros cuatro cuerpos entre los escombros, así como restos humanos”, dijo la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, en una conferencia de prensa el domingo por la noche en Surfside, al norte de Miami Beach.
Los hallazgos se produjeron luego que los rescatistas cavaran una enorme zanja, de 38 metros de largo, 6 de ancho y 12 de profundidad, a través de la montaña de escombros.
“Hemos identificado a cuatro víctimas adicionales, llegando a un total de ocho. Estamos trabajando para notificar primero a los familiares más cercanos”, informó la alcaldesa.
“Se están haciendo progresos. Tenemos abundantes equipos de rescate en el lugar”, dijo a su vez el alcalde de Surfside, Charles Burkett, a la cadena ABC, señalando que un grupo de México ya está operando.
Esfuerzo internacional
Entre los desaparecidos hay al menos 18 ciudadanos latinoamericanos, entre uruguayos, argentinos y paraguayos. Canadá también ha dicho que al menos cuatro de sus ciudadanos podrían estar “afectados”.
De seis a ocho escuadrones, respaldados por dos enormes grúas y ayudados por perros rastreadores, participan en el rastreo.
“Les dimos a todas las familias la oportunidad de visitar el sitio en privado”, dijo la alcaldesa de Miami-Dade.
Más de 100 personas visitaron el sitio durante el transcurso del día.
Los integrantes de cada uno de los tres grupos, uno por la mañana, uno por la tarde y otro por la noche, fueron trasladados en autobús por los departamentos de policía y bomberos de Miami-Dade y se les permitió quedarse durante una hora.
Un equipo de 10 expertos israelíes llegó el domingo para apoyar a sus colegas estadounidenses.
“Este es uno de los mejores equipos de rescate, si no el mejor y más experimentado”, dijo Nachman Shai, ministro israelí para asuntos de la diáspora judía, al llegar al lugar.
Muchos miembros de la comunidad judía de Surfside se encuentran entre los afectados por el siniestro ocurrido en la madrugada del jueves, e Israel se comprometió a ayudar.
En Surfside hay unos 2.500 judíos -aproximadamente la mitad de la población- y muchos de ellos son miembros del movimiento jasídico Jabad-Lubavitch, según medios de comunicación israelíes, aunque los lugareños dicen que su comunidad ha crecido desde la pandemia.
La operación de rescate ha sido angustiosamente lenta y minuciosa, y los temores de que el número de muertos sea mucho mayor aumentan con cada hora que pasa, aunque los rescatistas han subrayado que aún puede haber supervivientes atrapados entre los escombros.
Incendio controlado
La búsqueda se había complicado por un incendio cuyo humo había hecho inaccesibles algunas zonas.
“La buena noticia es que pudimos controlar el fuego y el humo al mediodía del sábado”, dijo el domingo la alcaldesa Levine Cava, a la cadena CBS, por lo que ahora “la visibilidad es buena”.
Cuatro víctimas han sido identificadas, dijo la policía local el sábado por la noche, dando a conocer sus nombres y números de apartamento.
Gladys y Antonio Lozano, de 79 y 83 años respectivamente, vivían en el mismo apartamento. Las otras dos personas tenían 54 años, una de las cuales, Stacie Fang, era la madre de un chico de 15 años rescatado de los escombros el jueves por la mañana, según el diario Miami Herald.
Un monumento fue improvisado en la valla del campamento base de rescate. Alrededor de las fotos de los desaparecidos, se colgaron ramos de flores y se colocaron velas en el suelo.
Este domingo el presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que su administración coordinaría con los funcionarios locales y estaba “lista para brindar cualquier apoyo o asistencia que se necesite”.
“Este es un momento inimaginablemente difícil para las familias que padecen esta tragedia”, dijo en un comunicado. “Mi corazón está con cada persona que sufre en este terrible momento”.
Meses de investigación
El jueves, antes del amanecer, se derrumbaron los 12 pisos de este complejo con vistas al mar, llamado Champlain Towers. La tragedia afectó a unos 55 apartamentos.
Las autoridades no han determinado el motivo del derrumbe, y eso podría tardar meses.
Pero las interrogantes sobre el origen de la tragedia son cada vez más apremiantes. Un residente del edificio puso en marcha una demanda colectiva, según la cadena NBC, para obtener una indemnización para las víctimas.
En tanto, varios viejos informes de inspección sobre el edificio han resurgido, incluido uno de 2018 que dio cuenta de “daños estructurales importantes” y “grietas” en el sótano, según documentos publicados el viernes por la ciudad de Surfside.