Los alegatos finales en el juicio contra el expolicía blanco Derek Chauvin por la muerte del afroamericano George Floyd serán el lunes de la semana próxima, anunció este lunes el juez de Mineápolis (Minesota, EE.UU.), Peter Cahill.
El magistrado, además, rechazó una petición de la defensa de Chauvin para aislar desde hoy mismo a los doce miembros del jurado con la intención de que no se vean influenciados por las protestas que la noche del domingo volvieron a sacudir Mineápolis tras la muerte de un afroamericano por disparos de la Policía.
Cahill indicó que el jurado será aislado el lunes, después de los argumentos finales, para empezar sus deliberaciones.
Para que el expolicía sea condenado, los doce miembros del jurado deben alcanzar un veredicto unánime en alguno de los cargos de los que se le acusa.
Chauvin, que fue despedido del Departamento de Policía de Mineápolis por la muerte de Floyd, está acusado de los delitos de asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años, y homicidio en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad.
Sin embargo, como no tiene antecedentes penales, solo podría ser condenado a un máximo de 12 años y medio de prisión por los primeros dos cargos y a 4 años de cárcel por el tercero.
Floyd perdió la vida el 25 de mayo de 2020 cuando cuatro agentes intentaron detenerlo por haber utilizado un billete falso para pagar en una tienda. Durante su arresto, Chauvin lo inmovilizó en el suelo presionando la rodilla contra su cuello hasta que dejó de respirar.
Hoy se celebra la undécima jornada del juicio por la muerte de Floyd, que provocó hace un año las mayores protestas contra el racismo en EE.UU. desde el asesinato de Martin Luther King Jr a finales de la década de 1960.
Esta jornada del juicio se celebra después de que anoche estallaran protestas contra la violencia policial en Brooklyn Center, al noroeste de Mineápolis, por la muerte del afroamericano Daunte Wright, de 20 años edad y al que la policía supuestamente disparó durante una parada de tráfico.
Los manifestantes se concentraron frente al departamento de policía de Brooklyn Center y lanzaron rocas y otros objetos contra el edificio.
Para dispersar a los manifestantes, la policía usó gas lacrimógeno y balas de goma, mientras que las autoridades decretaron el toque de queda hasta las 6:00 horas locales.