Estados Unidos activó el jueves en las Naciones Unidas un controvertido procedimiento con resultado incierto para exigir el restablecimiento de las sanciones internacionales contra Irán, acusado de haber violado el acuerdo nuclear de 2015.
El jefe de la diplomacia estadounidense, Mike Pompeo, “notificó al Consejo de Seguridad” un “incumplimiento significativo por parte de Irán de sus compromisos”, previstos por el texto que supuestamente impedía que Teherán adquiera la bomba atómica, según una carta de la que AFP obtuvo una copia.
La carta fue entregada personalmente por Pompeo al embajador de Indonesia Dian Triansyah Djani, quien preside el Consejo de Seguridad este mes.
Estados Unidos precisa activar este mecanismo, llamado “snapback”, reivindicando su estatuto de “participante” del acuerdo nuclear iraní de 2015.
Pero esa interpretación es jurídicamente contestada ya que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, retiró a su país del acuerdo en 2018 y volvió a imponer, y hasta endureció, sanciones unilaterales a Irán.
En respuesta, las autoridades iraníes comenzaron a retroceder en sus compromisos nucleares, principalmente en lo relacionado al enriquecimiento de uranio.
“A pesar de los esfuerzos extensivos y la diplomacia exhaustiva” llevados a cabo por Francia, Reino Unido, Alemania por llevar a la República [Islámica] por el camino correcto, sus violaciones “persisten”, afirmó Pompeo, estimando que “Estados Unidos no tiene ninguna otra opción” que activar el “snapback”.
En teoría, ese procedimiento complejo previsto por la resolución que había ratificado el acuerdo de 2015 debería permitir el regreso del resto de sanciones internacionales en 20 días, de manera prácticamente automática.
Pero según varios observadores, el embajador indonesio podría, tras consultarlo con otros miembros del Consejo, archivar la petición estadounidense.