Irán estuvo “casi seguramente” detrás de los actos de sabotaje del 12 de mayo contra cuatro navíos frente a las costas del emirato de Fuyaira, a la entrada del Golfo, afirmó este miércoles el consejero estadounidense de Seguridad Nacional John Bolton.
Los buques, entre ellos dos petroleros sauditas, fueron blanco de “minas navales, casi seguramente de Irán”, dijo Bolton a los periodistas a su llegada a los Emiratos Arabes Unidos.
Irán rechazó sin embargo “con firmeza” las acusaciones estadounidenses, que considera “ridículas”. “No son sorprendentes acusaciones tan ridículas”, dijo este miércoles el portavoz de Relaciones Exteriores, Abbas Musavi.
Estados Unidos participa con otros países en la investigación, dirigida por los Emiratos, sobre esos incidentes que aumentaron la tensión en el Golfo.
“No hay ninguna duda en Washington sobre la identidad del responsable de esta situación”, declaró Bolton.
“¿Quién más podría hacer eso? ¿Alguien de Nepal?”, preguntó irónicamente Bolton, que dijo que se iba a reunir con el príncipe heredero de Abu Dabi, Mohamed ben Zayed Al Nahyan, y con su homólogo Tahnun ben Zayed Al Nahyan para analizar las relaciones bilaterales y las tensiones regionales.
“Estamos preocupados y lo más alerta que podemos”, agregó Bolton.
Las tensiones regionales aumentaron desde que en abril la administración de Donald Trump incluyó a los Guardianes de la Revolución iraníes en su lista de “organizaciones terroristas”.
En mayo, Washington reforzó además las sanciones económicas contra Irán tras haber abandonado en 2015 el acuerdo internacional sobre el programa nuclear iraní.
También aumentaron las tensiones por los incidentes marítimos en mayo frente a las costas de Emiratos Árabes Unidos así como por la multiplicación de disparos de drones por parte de los rebeldes hutíes de Yemen, que tienen el apoyo de Irán.
A principios de mayo, Washington anunció el despliegue en el Golfo de un portaaviones y de bombarderos B-52 antes de decidir el envío de otros 1.500 soldados a Oriente Medio invocando “amenazas” iraníes.
El 24 de mayo la administración Trump informó al congreso estadounidense de nuevas ventas de armas a Arabia Saudita y a Emiratos Árabes Unidos, hablando de nuevo de “amenazas” de Irán.