Varias ciudades chinas cancelaron esta semana pruebas masivas del coronavirus, luego de que Pekín anunciara un alivio parcial de su estricta política de cero covid, que despertó expectativas de una reapertura del país.
La Comisión Nacional de Salud emitió reglas para “optimizar” el cero covid, como el alivio de algunas restricciones para reducir su impacto social y económico.
China reportó el miércoles más de 20.000 nuevos contagios, la cifra más alta desde abril, con brotes importantes en las ciudades de Cantón y Chongqing.
Las pruebas masivas de PCR son una herramienta clave para rastrear los contagios, y ciudades como Pekín y Shanghái exigen mostrar pruebas de un máximo de 72 horas para ingresar a espacios públicos o utilizar el transporte público.
Pero Shanghái abolió el domingo las pruebas masivas obligatorias, informó el medio China News Service citando autoridades anónimas.
Las fuentes indicaron que las pruebas “sólo serán realizadas cuando no está clara la fuente y la cadena de contagio, y cuando se ha propagado por mucho tiempo en la comunidad”.
Shijiazhuang, una ciudad de 11 millones de habitantes en la provincia norteña de Hebei, también anunció el domingo que adoptará las 20 medidas.
Ello incluye la cancelación de las pruebas masivas rutinarias, salvo para “grupos clave”, según autoridades locales citadas por China Newsweek.
Pero un dirigente del Partido Comunista de Shijiazhuang aclaró el lunes que las nuevas medidas no son un “relajamiento total” de las restricciones contra el coronavirus.
Usuarios de redes sociales reaccionaron con alegría y alarma, muchos de ellos reclamando que no se podían enviar paquetes desde Shijiazhuang por los estrictos controles sanitarios de otros gobiernos locales.
“Estoy sin habla, ¿por qué no abren el país entero en lugar de utilizar a Shijiazhuang como sitio experimental?”, preguntó un residente local en la red social china Weibo.
Otras ciudades como Yanki, noreste, y Hefei, este, también cancelaron esta semana las pruebas rutinarias masivas.
Las nuevas medidas también urgen a los gobiernos locales a “corregir las prácticas no científicas, como hacer dos o tres pruebas diarias”.
La ciudad de Ghulja, en la región noroccidental de Xinjiang, reanudará el miércoles la vida y trabajo normales, anunciaron las autoridades, al levantar un duro confinamiento de tres meses que provocó escasez alimentaria.