Al menos 11 niños murieron en un ataque aéreo que destruyó una escuela en una aldea del norte de Birmania, informó el martes UNICEF, y el ejército acusa a las milicias locales de utilizar a los civiles como escudos humanos.
“El 16 de septiembre, al menos 11 niños murieron como consecuencia de un ataque aéreo y de disparos indiscriminados en zonas civiles, incluida una escuela en Depeyin, en la región de Sagaing”, detalló UNICEF Birmania.
“Al menos 15 niños de la misma escuela desaparecieron. Pedimos su liberación inmediata y segura”, continuó el organismo de las Naciones Unidas.
Un video obtenido de una asociación local muestra manchas de sangre en el suelo de la escuela y el cadáver de un niño, envuelto en una sábana, junto a con su madre acongojada.
La junta birmana confirmó el martes “numerosos aldeanos muertos y heridos” durante una operación que implicó varios de sus helicópteros el pasado viernes en la zona afectada.
De momento se reportan 11 niños muertos en Birmania
El “Tatmadaw” (nombre de las fuerzas armadas birmanas) acusa a las milicias locales que combate de utilizar a los civiles como escudos humanos y de cometer crímenes de guerra.
En el curso de esa operación, las fuerzas armadas también se apoderaron de 23 minas y ocho bombas de fabricación casera.
La comunidad internacional “debe condenar este ataque y hacer todo lo posible para que los culpables rindan cuentas”, reaccionó Hassan Noor, director para Asia de la ONG Save the Children.
“Pedimos a la ASEAN (Asociación de Naciones del Asia Sudoriental) que actúe. ¿Cuántos incidentes como éste deben ocurrir antes de que se tomen medidas?”, continuó.
Desde el golpe de Estado del 1 de febrero de 2021 que derrocó a la dirigente civil Aung San Suu Kyi, el ejército gobernante lleva a cabo una represión sangrienta contra sus opositores, con cerca de 2.300 civiles muertos y más de 15.000 detenidos, según una ONG local.