“El SJB ha entregado dos mociones de censura contra el presidente y el Gobierno al presidente del Parlamento”, dijo en Twitter el partido opositor liderado por Sajith Premadasa.
Los objetivos del SJB son destituir al mandatario y abolir las enmiendas constitucionales promovidas por Rajapaksa a su llegada al poder en los comicios de 2020, que otorgan enormes poderes al presidente.
Las mociones de censura fueron anunciadas por el partido opositor a mediados del pasado abril, aunque no está claro si el SJB dispone de los apoyos necesarios en la Cámara para avanzar el proceso.
La nación isleña se enfrenta a una crisis económica sin precedentes provocada, en parte, por su gran endeudamiento, la recesión económica durante la pandemia y una caída drástica de la actividad turística.
Sin divisas suficientes para adquirir alimentos, combustible y necesidades básicas, Sri Lanka entró hace meses en una espiral inflacionaria y de escasez, lo que llevó a que la semana pasada anunciase la suspensión temporal del pago de su deuda externa.
La crisis económica ha precipitado además una ola de inestabilidad política y multitudinarias protestas.
El Gabinete de ministros de Rajapaksa dimitió en masa a principios de abril a causa de las manifestaciones, forzando al presidente a nombrar un nuevo Ejecutivo en el que excluyó a todos los miembros de su clan a excepción de su hermano Mahinda Rajapaksa, que se ha mantenido como primer ministro de Sri Lanka.
El tono de las protestas se agravó después de que el pasado 30 de marzo las autoridades esrilanquesas aumentaron a 13 horas los cortes de energía en el país, y desde entonces se han instalado varias acampadas frente a la Secretaría Presidencial y la residencia del primer ministro en la capital.
El pasado domingo, con motivo del Día Internacional del Trabajo, decenas de miles de personas convocadas por sindicatos y partidos opositores protestaron contra Rajapaksa y su Gobierno.
El expresidente y líder del Partido de la Libertad de Sri Lanka (SLFP), Maithripala Sirisena, afiliado al Gobierno hasta que comenzaron las protestas, llamó a elecciones anticipadas, mientras que el opositor SJB prometió “tumbar” a Rajapaksa.
A pesar de las multitudinarias protestas, tanto el presidente como el primer ministro se han mantenido firmes en sus puestos, mientras que Rajapaksa ha reiterado las peticiones de formar un Gobierno de unidad nacional.