Una persona murió y entre 70 y 100 más se encuentran desaparecidas este miércoles tras el derrumbe de una mina de jade en el norte de Birmania (Myanmar), informaron medios locales.
El deslizamiento de tierra se produjo durante la madrugada en la remota localidad de Hpakant, en el estado Kachin, y podría haber arrastrado a más de un centenar personas, según detalló el diario The Irrawaddy.
El pasado fin de semana se produjo otro accidente similar que dejó seis muertos en el mismo complejo minero, el más grande del mundo dedicado al jade, informó por su parte el portal local Mizzima.
Este tipo de sucesos son frecuentes en Hpakant, donde los mineros trabajan en condiciones extremadamente precarias.
En julio de 2020 otro derrumbe en Birmania sepultó a más de 160 mineros mientras estaban extrayendo el codiciado jade de las laderas excavadas en medio de una lluvia torrencial.
Un año antes, al menos 54 personas murieron a causa de un corrimiento de tierras en otro punto del complejo minero. Se trató de una zona localizada a unos 800 kilómetros al norte de la capital, Naipyidó.
Las minas de jade, a las que la prensa extranjera tiene el acceso vedado, se han convertido en un imán para miles de birmanos empobrecidos procedentes de todo el país, pero en la mayoría de los casos los beneficios son escasos y los riesgos son elevados.
Birmania es el mayor productor mundial de jadeíta, una preciada variedad de jade que se extrae principalmente en las montañas de Kachin y está especialmente codiciada en la vecina China, dónde van a parar la mayoría de las exportaciones.