Los talibanes se apoderaron de la segunda mayor represa de Afganistán tras meses de intensos combates en la provincia de Kandahar, según informó autoridades locales.

La presa de Dahla contribuye a la irrigación de las tierras agrícolas a través de una amplia red de canales y suministra agua a la capital de la provincia, Kandahar.

“Hemos tomado la presa de Dahla en Arghandab”, dijo Qari Yousuf Ahmadi, un portavoz de los insurgentes.

Haji Gulbuddin, gobernador de un distrito vecino a Arghandab, confirmó que la presa estaba “ahora bajo control de los talibanes”.

“Nuestras fuerzas de seguridad (…) pidieron refuerzos pero no los consiguieron”, explicó.

La toma de la represa se produce en medio de intensos combates en la vecina provincia de Helmand.

Estos iniciaron el fin de semana después de que los estadounidenses comenzaran a retirar sus últimas tropas.

Los talibanes habían advertido a los trabajadores de la represa de Dahla que no fueran a trabajar, dijo Tooryalay Mahboobi, jefe del departamento de aguas de la provincia.