Kirguistán dijo el jueves que había tomado un puesto fronterizo de Tayikistán tras combates que dejaron al menos un muerto y 18 heridos, los peores enfrentamientos entre estos dos países de Asia Central de la historia reciente.
El intercambio de disparos se produjo en torno al enclave tayiko de Vorukh, en Kirguistán, una zona de tensión relacionada con cuestiones de acceso al agua entre estas dos antiguas repúblicas soviéticas.
Según el ministerio de Sanidad de Kirguistán, 17 kirguises resultaron heridos, uno de ellos mortalmente, mientras que el Consejo de Seguridad de Tayikistán informó de dos heridos de bala, uno de ellos grave.
El Consejo de Seguridad Nacional de Kirguistán dijo en un comunicado que sus fuerzas especiales tomaron el control de la posición en respuesta a los bombardeos tayikos que incendiaron un puesto fronterizo controlado por los kirguises.
Ambas partes se culparon mutuamente de los enfrentamientos. El Comité de Seguridad Nacional de Kirguistán afirmó que Tayikistán había “provocado deliberadamente un conflicto” en ese punto de la frontera.
Gran parte de la frontera entre los dos países no ha sido demarcada desde la desintegración de la Unión Soviética en 1991, donde las tensiones étnicas se ven acentuadas por rivalidades por el acceso a la tierra y el agua.
Alto al fuego
Tras los enfrentamientos, Kirguistán afirmó que había alcanzado un alto el fuego con Tayikistán.
“Como resultado de negociaciones entre los ministerios de Relaciones Exteriores de la República de Kirguistán y la República de Tayikistán, se logró un acuerdo para un alto el fuego completo a partir de las 20:00 (10:00 en Chile) y la retirada de fuerzas militares”, indicó el Ministerio de Exteriores kirguís en un comunicado.