La Policía de Hong Kong arrestó hoy a medio centenar de políticos opositores y activistas por su supuesta violación de la polémica Ley de Seguridad Nacional, informó la prensa hongkonesa.
Muchos de los opositores, entre ellos varios exdiputados, fueron detenidos por su participación en las primarias del bando demócrata el pasado mes de julio de cara a los comicios legislativos de septiembre, que fueron finalmente pospuestos por las autoridades so pretexto de la pandemia de coronavirus.
Se trata de la detención más numerosa desde que entró en vigor, el pasado 30 de junio, la controvertida Ley de Seguridad Nacional, que pena hasta con cadena perpetua supuestos de secesión o de confabulación con fuerzas extranjeras.
El Partido Democrático aseguró a través de su perfil en la red social Twitter que la Policía consideró la campaña demócrata para intentar hacerse con la mayoría en el parlamento hongkonés “un acto de subversión que viola la Ley de Seguridad Nacional”.
Entre los detenidos están los exdiputados Leung Kwok-Hung, Gary Fan, Lam Cheuk-ting, Chu Hoi-dick, Au Nok-hin, Alvin Yeung, Wu Chi-wai, James To y Andrew Wan.
El organizador de las primarias, Benny Tai, también fue uno de los arrestados, así como Robert Chung, director ejecutivo del Instituto de Investigación de Opinión Pública de Hong Kong (PORI, por su acrónimo en inglés), empresa que proporcionó la tecnología necesaria para llevar las votaciones a cabo.
El número dos de PORI, Chung Kim-wash, señaló hoy en la emisora Commercial Radio que la Policía se puso en contacto con él hoy para que ayudara con las investigaciones.
Por su parte, la investigadora sobre china de la organización de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch Maya Wang afirmó hoy que “el Gobierno chino ha decidido celebrar 2021 con las detenciones de más de 50 destacados activistas prodemocráticos en Hong Kong, borrando así los restos de apariencia democrática que quedaban en la ciudad”.
“Una vez más, Pekín no aprende de sus errores en Hong Kong: la represión genera resistencia, y millones de hongkoneses continuarán con su lucha por su derecho al voto y a presentarse como candidatos a un gobierno elegido democráticamente”, apuntó.
Desde la entrada en vigor de la controvertida ley de seguridad -diseñada e impuesta por Pekín- se han sucedido numerosas redadas policiales y detenciones de activistas, ante lo que algunos de ellos han optado por exiliarse para tratar de evitar represalias por actividades que, bajo la nueva legislación, podrían ser constitutivas de delito.