Una marea humana invadió las calles de Ahvaz este domingo para recibir el cuerpo del poderoso comandante de la Guardia Revolucionaria iraní Qasem Soleimaní, asesinado por Estados Unidos el viernes en Irak, al grito de “Muerte a Estados Unidos”, “Muerte a Israel” y “Muerte a Arabia Saudí”.
La primera de las varias ceremonias fúnebres en Irán que honrarán al general es esta de la ciudad de Ahvaz, en el suroeste del país y fronteriza con Irak, y al mediodía los restos serán trasladados a la ciudad santa de Mashad (noreste) y posteriormente a Teherán.
El cuerpo de Soleimani llegó antes del amanecer al aeropuerto de esta ciudad del sudoeste de Irán de fuerte minoría árabe, según la agencia semioficial Isna.
Los restos del vicepresidente de la milicia chií iraquí Multitud Popular, Abu Mahdi al Mohandes, y de otros miembros del grupo asesinado el viernes forman parte del cortejo fúnebre en Irán ya que están mezclados con los de Soleimani y será necesario practicarles pruebas de ADN. Tras estas pruebas, los restos de los iraquíes serán devueltos a su país, donde ayer se celebraron también cortejos fúnebres en Bagdad y otras ciudades.
Hombre y mujeres lloraban y se golpeaban el pecho al ritmo de una entonación chiita que repetía “Has cumplido tu sueño, has encontrado al imán Husein. ¡Oh! Has cumplido tu sueño“. Nieto de Mahoma, el imán Husein es una de las figuras santas más veneradas del chiismo, y los fieles suelen referirse a él como el “Señor de los mártires”.
La movilización en esta ciudad, capital de Juzestán, provincia mártir durante la guerra Irán-Irak (1980-1988) en la que Soleimani comenzó a brillar, marca el inicio de tres días de ceremonias en su honor en su país natal, tras las que tuvieron lugar el sábado en Irak. Las exequias continuarán mañana en Teherán, donde se celebrará el principal funeral, y terminarán en la ciudad natal de Soleimaní, Kerman, en el sur del país.