Una niña india de 10 años, víctima de repetidas violaciones, fue autorizada a abortar pese a haber vencido el plazo en que se autorizan las interrupciones voluntarias de embarazo, anunció este miércoles la policía.
La niña, a la que su madre dejaba con frecuencia en casa cuando iba a trabajar en obras de construcción, contó que fue víctima de violaciones repetidas por parte de su padrastro. Este último fue detenido.
Cuando la niña denunció las violaciones había vencido el plazo de 20 semanas durante el cual se autorizan las interrupciones voluntarias de embarazo. Únicamente se aceptan en caso de que la vida de la madre o de su hijo corran peligro.
La justicia ha actuado. “El tribunal decidió recurrir a la opinión de un consejo de médicos que ha decidido practicar una interrupción voluntaria del embarazo”, declaró a la Agence France-Presse un portavoz de la policía. La intervención tendrá lugar rápidamente, según la misma fuente.
En los últimos meses, varias mujeres víctimas de violación o de trata de seres humanos recurrieron a la principal jurisdicción india para pedir autorización para abortar pasado el plazo legal.
Los defensores de los derechos de las mujeres militan para extender este plazo a 24 semanas, alegando que las víctimas de violación no se precipitan a declarar un embarazo
Según el periódico Indian Express, la madre de la niña desea que el sospechoso sea puesto en libertad, argumentando que se ha excusado y que ella tiene otros menores a su cargo.
“La vida de la niña está destruida pero ¿qué va a ser de mis otros niños? Tengo que pensar también en su futuro”, declaró al periódico.
India tiene un triste balance en materia de violaciones. En 2012, la violación colectiva de una estudiante en Nueva Delhi causó indignación a nivel nacional y puso en evidencia la violencia que sufren las mujeres en este país de 1.250 millones de habitantes.
Solo en la capital se señalaron 2.199 violaciones en 2015, un promedio de seis diarias.
Una comisión de la ONU sobre los derechos de la infancia puso la alarma en 2014 sobre la frecuencia de abusos sexuales cometidos sobre los niños y niñas. Declaró que una de cada tres víctimas de violación es menor.