Por “motivos de seguridad”, la presidenta de Perú, Dina Boluarte, y su homólogo de China, Xi Jinping, inaugurarán el Megapuerto de Chancay en una ceremonia virtual, desde Palacio de Gobierno, en Lima.
Lo harán, posiblemente con un paro de transportistas en curso, marchas y plantones en la capital, durante la mañana del jueves 14 de noviembre y en plena la celebración de la nueva edición del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico, también llamado APEC, que reunirá en territorio peruano a presidentes de diversos países, líderes políticos y ejecutivos de empresas mundiales.
En los últimos días, los ministros de Boluarte, Elmer Shialler, de Relaciones Exteriores, y Raúl Pérez-Reyes, de Transportes y Comunicaciones, brindaron detalles importantes de la tan esperada inauguración del megapuerto, que ha supuesto la inversión de unos 1,400 millones de dólares para contar con cuatro muelles, grúas especializadas y vehículos autónomos.
Desde las instalaciones de Chancay, ubicado a 80 kilómetros de la capital peruana, y a donde llegó para una supervisión, Pérez-Reyes informó que la importante obra “tiene un avance general del 98 %”.
“Estará listo para inaugurarse el 14 de noviembre y consolidará al Perú como el principal hub portuario del Pacífico Sur con salida directa al continente asiático”, dijo el titular del sector Transportes.
El canciller Shialler, por su parte, afirmó que “es una inauguración real”, pero con la salvedad que la participación de Dina Boluarte y Xi Jinping será virtual, aunque acompañados de “un nutrido grupo de peruanos y ciudadanos chinos”.
“No van a estar en Chancay por razones de seguridad del propio presidente chino”, detalló.
Paro, marchas y plantones
Para los mismos días que está programado el APEC y la inauguración del megapuerto peruano, diversos gremios, pero principalmente el de transportistas por los casos de extorsiones y sicariato en su contra, convocaron a un paro nacional de 72 horas y marchas en Lima y regiones.
BioBioChile contactó con dirigentes de la Alianza Nacional de Transportistas, uno de los principales gremios protestantes por la crisis de inseguridad en el Perú, y confirmaron que “el paro va porque va” en los días ya anunciados.
Los familiares de las decenas de personas fallecidas durante las protestas de diciembre de 2022 a marzo de 2023 contra el gobierno de Dina Boluarte también participarán de la paralización y movilización contra la criminalidad y para exigir la renuncia de la mandataria peruana.
No solo la inauguración del Megapuerto de Chancay, sino también la organización del APEC podría verse opacado por el paro anunciado, ya advirtieron los expertos.
Para Miguel Ángel Rodríguez-Mackay, profesor de Derecho Internacional y exministro de Relaciones Exteriores, la decisión del presidente chino de no ir al mismo puerto es “extraña” y podría entenderse que no hay una buena imagen en el exterior de la seguridad en el Perú.
“No ir viniendo de tan lejos a un lugar tan solo a 40 minutos de Lima, me parece muy extraño. Es gravísimo como mensaje sobre la seguridad en el país”, declaró al diario Correo.
La agencia estadounidense Associated Press (AP) preguntó a la Cancillería peruana a qué tipo de razones de seguridad se refería y también pidió los comentarios de la embajada de China en Perú, pero —hasta la publicación del presente informe— no obtuvo respuesta.
Debilidad política
Luis Herrera, exjefe del Gabinete de Asesores del Ministerio del Interior y expositor en seguridad y gestión pública, aseguró que el Gobierno demuestra “debilidad política” al no poder garantizar la seguridad del presidente de China, Xi Jinping, para que viaje a Chancay a inaugurar el megapuerto.
“Esto nos muestra que la apreciación de los equipos de seguridad de los mandatarios que van a asistir a la APEC no solamente han señalado de que hay inseguridad ciudadana, sino que, además, hay debilidad política en el gobierno”, dijo a Exitosa.
Según Herrera, todos esperaban que la inauguración del puerto fuera “por todo lo alto”, pero la decisión de hacerlo vía Zoom muestra claramente que hay una “apreciación negativa” de la coyuntura en el Perú.
BioBioChile conoció por fuentes allegadas a Palacio de Gobierno que, en realidad, habrá dos inauguraciones. La virtual que será “simbólica” y otra presencial, en paralelo, desde las mismas instalaciones del megapuerto con la participación de altos funcionarios de la Cancillería peruana y de la república popular de China.
“Singapur de América Latina”
En su visita a Chancay, además de comunicar la fecha de inauguración, el ministro Pérez- Reyes también manifestó abiertamente los planes que tiene el gobierno peruano con la operación de este megapuerto.
“Nuestro objetivo es convertirnos en el Singapur de América Latina, de forma tal que la carga portuaria pase por aquí cuando vaya a Asia. Cuando alguien, desde Brasil, Venezuela, Bolivia, Paraguay o Argentina, quiera ir hacia allá, piense en Perú como un punto de salida. A eso apuntamos”, señaló.
En una entrevista con BioBioChile, Caupolicán Guerra, académico de la facultad de ingeniería marítima de la Universidad Andrés Bello, se refirió justamente a la posibilidad de que Chile pierda cabotaje hacia China.
“Claro que puede ocurrir, porque Chancay, si lo que tiene proyectado a futuro se da, que a mí no me cabe la menor duda porque está ubicado en un lugar estratégico, va a tener un movimiento realmente gigantesco”, afirmó.
Según el experto, es evidente que el Megapuerto de Chancay “va a poner en riesgo” la economía de Chile, a través de los exportadores e importadores.
“No olvidemos que los peruanos exportan plátano, arándano, uva, palta, café, cacao y cobre también. Por lo tanto, ellos con fletes mucho más atractivos, con costos menores, nos van a hacer una competencia que quizá no podamos superar”, advirtió.
Explicó que los buques de Chancay a China van a demorar en llegar menos tiempo, lo que se traduce en un menor gasto de toneladas de combustible y se reducirá de forma significativa el costo diario por embarcación, dando como resultado una disminución en el valor del flete (contraprestación económica por realizar un transporte por barco).
“Va a ser muy difícil que nosotros podamos competir en esas condiciones. Pensemos cuando tenga ya sus 15 terminales terminados. Entiendo que los políticos y las autoridades portuarias deben mantener un discurso muy optimista, pero la realidad técnica es otra”, acotó.
Competencia saludable
Una posición distinta a Guerra mostró Viviana Véjar, investigadora de la Universidad del Desarrollo de Chile, quien ve a la inauguración de Chancay como algo positivo para la región en general y no solo para el Perú.
“Ha habido algunos economistas y académicos que se han atrevido a decir que esto va a ser muy dañino para la economía chilena, pero la verdad de las cosas es que uno siempre tiene que pensar en los países vecinos como una competencia saludable”, indicó a TV Perú.
A fines de junio de este año, Eduardo Abedrapo, presidente del directorio de San Antonio, uno de los puertos más importantes de Chile, declaró que “Chancay no es rival” para ellos y descartó que el proyecto peruano se convierta un puerto hub.
“El Puerto de Chancay, al que tanto se ha hecho alusión en Chile, es un puerto que va a descongestionar el Puerto de Callao. Va a atender la carga doméstica, por tanto, la posibilidad de ser un puerto hub no es cierta. Hoy día, por lo menos, no existe”, afirmó.
Las intenciones del gobierno peruano parecen contradecirlo: el objetivo es convertirse en el “Singapur de América Latina” y lo tienen más que claro.