Un alcalde mexicano fue asesinado a sólo seis días de haber asumido en el cargo. Los responsables del crimen decapitaron al político y luego dejaron su cabeza sobre una camioneta.
Se trata de Alejandro Arcos Catalán, quién apenas el lunes 30 de septiembre había tomado posesión como presidente municipal de la ciudad de Chilpancingo, capital del estado mexicano de Guerrero.
De acuerdo a la Fiscalía General del Estado (FGE), Arcos fue asesinado la tarde del domingo, confirmando que ya abrió una investigación para esclarecer las circunstancias en las que ocurrió el macabro hecho.
A su vez, se detalló que quienes resulten responsables serán formalizados por el delito de homicidio calificado. Cabe señalar que sólo tres días antes había sido asesinado su secretario general de gobierno, Francisco Tapia.
Medios locales como El Universal consignan que la cabeza de la víctima fue hallada sobre una camioneta en la colonia Villas del Roble, en el oriente de la capital de Guerrero.
“Han asesinado a nuestro alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, y hace apenas tres días al secretario de este mismo Ayuntamiento, Francisco Tapia. Llevaban menos de una semana en el cargo”, escribió en redes sociales Alejandro Moreno, presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), al que pertenecía el alcalde.
“Funcionarios jóvenes y honestos que buscaban progreso para su comunidad. Nuestro pésame y solidaridad para sus familias. Dada la situación de ingobernabilidad en Guerrero, estaremos pidiendo la FGR atraiga las investigaciones de ambos asesinatos”, agregó.
Desde la cuenta en Facebook del alcalde destacaron que su vida “fue un reflejo de paz, servicio y amor incondicional hacia su comunidad y seres queridos”.
“En su memoria, sigamos construyendo el legado de unidad, amor y justicia por el que él vivió y luchó”, añadieron.
Tal como consigna Agencia EFE, la violencia criminal en Guerrero y en la capital Chilpancingo ha ido en aumento en los últimos años con disputas constantes de grupos del crimen organizado por el control territorial para el tráfico de drogas y extorsión, entre otros delitos.